Luxemburgo presenta su programa para la Presidencia de la CEE

El actual presidente del Consejo de Ministros de la CEE, el luxemburgués Jacques de Poos, presentó ayer ante el Parlamento Europeo (reunido en Luxemburgo, pues el edificio de Estrasburgo está siendo remozado para dar cabida a los eurodiputados ibéricos) el programa de acción para los próximos seis meses. Pero este es un programa vacío de contenido.Luxemburgo presentó un programa en el que se cubre todo, pero se dice muy poco sobre el cómo. De la conferencia intergubernamental sobre el futuro institucional de la CEE, prácticamente ni se habla, salvo para señalar que la Presidencia presentará propuestas para reforzar la participación del Parlamento Europeo al proceso de decisiones comunitarias.

Hay buenas palabras sobre la lucha contra el paro, el crecimiento dinámico, el reforzamiento del mercado interior en la CEE y del sistema monetario europeo, la cooperación tecnológica en la Europa de los ciudadanos, la política hacia los países mediterráneos, la reforma de la política agrícola común (a corto y largo plazo), "teniendo en cuenta también la adhesión ibérica, y señalando que el Consejo debe adoptar además las medidas de aplicación del régimen transitorio decidido para ciertos reglamentos agrícolas, en el caso de España y Portugal".La política siderúrgica

Única preocupación inmediata parece ser el futuro de la política siderúrgica, pues el actual código de ayudas en la CEE expira el 31 de diciembre de este año. La Comisión Europea, reunida ayer en Luxemburgo, preparaba sus propuestas en esta materia.

Las relaciones entre la CEE y América Latina fueron ampliamente desarrolladas por De Poos, cuando está en marcha la negociación de un acuerdo de cooperación económica y política entre la Comunidad y América Central. En cuanto a la cooperación política señaló que no hay que dejar pasar la ocasión de la cita de Helsinki (del 30 de julio al 1 de agosto), que celebrará el X Aniversario del Acta Final de la Conferencia de Seguridad y Cooperación en Europa, a pesar de las decepciones. Y, finalmente, insistió sobre la necesidad de incrementar en la CEE la cooperación antiterrorista y tomar medidas de protección de los aeropuertos.