Javier Solana, un fiel amigo de González

Javier Solana Madariaga, que en esta crisis se mantiene como ministro de Cultura y acumula las funciones de portavoz del Gobierno, es, ante todo, un viejo aliado político de Felipe González, con el que formó el núcleo de mando del PSOE desde antes de la legalización del partido, cuando en diciembre de 1976 pasó a formar parte, en el 27º Congreso, de la ejecutiva del partido. Entonces, y en la etapa posterior, Solana era considerado el tercer hombre en la cúpula del PSOE, junto a Felipe González y Alfonso Guerra. Pocos militantes socialistas, en cualquier caso, podrán acreditar como él una antigüedad en el partido, que se remonta a 1964.Javier Solana nació en Madrid el 14 de julio de 1942; está casado con Concepción Jiménez, tiene dos hijos y es doctor en Ciencias Físicas por la universidad Complutense de Madrid. Cursó el bachillerato en el colegio del Pilar, cuyas promociones llenan la vida pública española desde los primeros años setenta.

Realizó sus estudios universitarios desde 1959 hasta 1965, siendo éstos interrumpidos durante un año, en 1963, al imponérsele un expediente sancionador aplicado a los estudiantes responsables de la Semana de Renovación Universitaria. En ese período, Javier Solana trabajó en institutos universitarios de Inglaterra y Holanda, continuando después su formación científica en Estados Unidos, becado por la Fundación Fulbright, y regresó a España en 1971.

Militante desde 1964

Con militancia acreditada en el PSOE desde 1964, pasó a formar parte en 1971 de las ejecutivas de la Federación Socialista Madrileña y de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza de UGT. Miembro de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE desde el 272 congreso, en 1976, hasta su exclusión en el 30º congreso, celebrado en diciembre de 1984, al aplicársele, lo mismo que a otros miembros del Gobierno, el principio moral de las incompatibilidades entre alto cargo en la Administración y en el partido.Hasta entonces había ocupado en el PSOE, sucesivamente, las secretarías de Prensa y de Estudios y Programas. En las elecciones legislativas del 28 de octubre de 1982 fue elegido diputado por Madrid y figuraba el segundo en la lista, después de Felipe González.

Las líneas básicas de su gestión como ministro de Cultura fueron expuestas durante su comparecencia ante la Comisión de Cultura y Educación del Congreso, el pasado 21 de mayo, en cuanto a la actividad legislativa (elaboración de la ley del Patrimonio Histórico-Artístico y los decretos de ayuda al cine), presupuestaria (aumento hasta alcanzar el 0,98% de los Presupuestos Generales del Estado), de personal (reducción de funcionarios desde 20.000 hasta 6.000, a causa de las transferencias a las autonomías) y a la reestructuración del departamento. Sobre la situación de la ley de Propiedad Intelectual informó que el Gobierno está a la espera de conocer un dictamen solicitado al Senado.