La UGT, dividida ante el posible acuerdo con el PSOE sobre el proyecto de pensiones

Sectores de UGT plantearán en el comité confederal de este sindicato, a celebrar en fecha que aún no ha sido fijada, la necesidad de que la central socialista tome una postura definitiva respecto a la ley de pensiones. Mientras federaciones como la del metal quieren que se ponga fin al actual conflicto, dando el visto bueno al proyecto, otras defenderán un rechazo total y la exigencia de una reforma global en línea con lo que UGT ha propugnado. Ambos sectores coinciden en que los negociadores no han informado del contenido de las conversaciones al resto de la organización.

Un antecedente de lo que puede ser el comité confederal de UGT, que tendrá que decidir sobre la reforma de pensiones, fue la reunión que hace escasos días mantuvieron Antón Saracíbar y José María Zufiaur, ambos miembros de la comisión negociadora con el PSOE, con responsables sindicales.En aquella ocasión, según distintas versiones, se ofreció una somera información sobre el estado de las conversaciones, aduciendo que no era conveniente entrar en detalles ante el peligro de filtración a la Prensa. Esta valoración fue contestada con crispación por algunos de los presentes que acusaron a la ejecutiva de que los responsables de cada organización tenían que enterarse de las negociaciones a través de los medios de comunicación.

Antonio Puerta, secretario general del metal, llegó a calificar de "farsa" la postura que estaban manteniendo los negociadores de UGT y se mostró a favor de aceptar las modificaciones propuestas por el PSOE, que, a su juicio, podían haberse negociado hace meses, sin necesidad de llegar al enfrentamiento con el Gobierno.

Las fuentes ugetistas consultadas están convencidas de la imposibilidad de un acuerdo total en las negociaciones entre PSOE y UGT, que, según algunas versiones, se dieron ayer prácticamente por finalizadas. En el comité confederal algunas federaciones -las conocidas como "duras"- mantendrán una postura fuertemente crítica, exigiendo que no se admita la existencia de acuerdo, mientras no se aborde la reforma global de la Seguridad Social.

El comité de banca se pronunció ayer a este respecto con una resolución en la que exige la reforma global de la Seguridad Social, rechaza el proyecto del Gobierno "al contener exclusivamente un recorte de las prestaciones", y señala que aunque las posibles modificaciones supongan cambios 'sustanciales, "en ningún caso puede significar la aceptación del proyecto de ley".

Pensión de beneficencia

Por otra parte, Marcelino Camacho afirmó ayer en Salamanca que la pensión de asistencia social objeto de las negociaciones entre UGT y el Gobierno es para el trabajador una pensión de beneficencia "para darle de comer de alguna manera y no dejarle morir", informa María del Mar Rosell. El secretario general de CC 00 dijo que este sindicato no participará nunca en concertación social si no cambia la política económica actual, que "sólo ha dado paro y más crisis".