Los presidentes de las comunidades autónomas asistirán a la firma de la adhesión a la Comunidad Económica Europea

Los presidentes de las diferentes comunidades autónomas, que no estaban incluidos en las listas de protocolo elaboradas por la Presidencia del Gobierno, asistirán finalmente al histórico acto de la firma del tratado de adhesión de España a las Comunidades Europeas. El presidente del Gobierno, Felipe González, cursó a primera hora de ayer las instrucciones pertinentes para que llegaran las respectivas invitaciones. La ceremonia de la firma, que, presidida por el rey Juan Carlos, se iniciará a las 20.30 en el palacio Real, contará con la presencia de seis primeros ministros. No se desplazará ni a Madrid ni a Lisboa -donde por la mañana se firmará el tratado de adhesión de Portugal- ningún jefe de Estado comunitario."A partir de ahora, España va a dar un giro histórico, y se inicia una nueva etapa", según afirmó ayer el presidente del Gobierno, Felipe González, tras la celebración del Consejo de Ministros celebrado en el Congreso para aprobar la firma del tratado de adhesión de España a la CEE. "Éste es el mejor tratado posible y nadie nos podrá negar el enorme esfuerzo que se ha hecho". "El equipo negociador ha realizado un esfuerzo titánico, que hay que reconocer", afirmó visiblemente contento Felipe González.

El jefe del Ejecutivo negó que España iniciara ahora desde dentro un proceso de renegociación del tratado para mejorarlo. "Lo único que pretendo es ayudar a la construcción de Europa defendiendo los intereses nacionales" afirmó Felipe González.

Sin declaraciones

Ayer por la tarde, la asistencia de los 17 presidentes de comunidades autónomas estaba, prácticamente asegurada. El presidente de la Generalitat catalana, Jordi Pujol, de quien había partido la iniciativa para estar presente en el acto, confirmó expresamente su asistencia, lo mismo que José Antonio Ardanza, lendakari del Gobierno vasco.

Pujol no quiso realizar declaración alguna sobre la decisión del Gobierno, ni antes ni después de conocer la invitación. El gabinete de prensa del Palau de la Generalitat se limitó a confirmar la asistencia de Pujol al acto, sin añadir ningún comentario. El portavoz del Gobierno, Eduardo Sotillos, manifestó por su parte que Pujol se puso ayer por la mañana en contacto telefónico con el presidente del Gobierno, Felipe González, para expresarle su deseo de asistir a la ceremonia de la firma de la adhesión. A raíz de está petición y la de otro presidente autonómico, Felipe González dio órdenes para que fueran invitados.

Nada más conocerse que únicamente el presidente de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina, asistiría al acto, comenzaron a emitirse críticas en los sectores nacionalistas catalanes, que estimaban que con ello se ponía de manifiesto la débil credibilidad que otorgaba el Gobierno socialista al Estado de las autonomías.

Antes de conocerse la invitación formal, algunos máximos mandatarios autonómicos habían expresado asimismo críticas por la exclusión. El presidente de la Xunta de Galicia, Gerardo Fernández Albor, expresó su disgusto y calificó la decisión como "injustificable", afirmando que pediría a la Presidencia del Gobierno una explicación. "He escuchado también", dijo el doctor Fernández Albor, "que alguien había dicho que las invitaciones no habían sido cursadas por falta de tiempo, pero eso me parece de risa y no creo ni que se atrevieran a decirlo", informa Xosé María Palmeiro.

Por su parte, José Rodríguez de la Borbolla, presidente de la Junta de Andalucía, no dio importancia alguna al cambio de actitud del Gobierno central sobre la invitación a los presidentes autonómicos al acto de la firma, informa Carlos Funcia desde Sevilla. "Las competencias en materia de relaciones exteriores del Estado corresponden al Gobierno español, y cualquier cosa que decida en estos temas para mí vale. Evidentemente, estimo que Andalucía está bien representada en las actitudes del Gobierno al respecto", afirmó el presidente de la Junta, Rodríguez de la Borbolla.

El presidente del Gobierno autónomo de Canarias, Jerónimo Saavedra, del Partido Socialista Obrero Español, señaló ayer a este periódico antes de conocerse el cambio de planes gubernamentales que la ausencia podía estar justificada si se pretendía dar al acto carácter de acto de Estado. "Pero si la ceremonia va a tener luego una dimensión más general, en ese caso parecería lógico que los presidentes de todas las comunidades autónomas estuvieran presentes", señaló Saavedra a Carmelo Martín.