Cataluña y Euskadi, diferencias y conflictos con el poder central

Las intervenciones en las Jornadas de los directores generales de las televisiones autonómicas vasca y catalana, Andoni Areizaga y Joan Granados, pusieron de relieve el conflicto, todavía no resuelto, con el Gobierno central y con RTVE, y los errores que de ello se derivan: multiplicación de costes para el erario público en infraestructura, que pudo evitarse, especialmente en la red, y el principio de desigualdad para estos canales respecto, a RTVE, porque no se facilita su ingreso en la Unión Europea de Radiodifusión (UER).Estos conflictos y obstáculos políticos se traducen en mayores costes economicos y en graves dificultades para. la cobertura de información internacional. A ello se suma el conflicto con RTVE, que ostenta el monopolio de la red nacional, y que por regla general no permite el tráfico de señales con destino a los canales autonómicos. Francisco Virseda, director general de Medios de Comunicación Social, apoyó implícitamente a RTVE y no avanzó salida alguna a corto plazo para equilibrar el servicio que ya prestan las tres entidades públicas de televisión, a las que se sumará este año la gallega.

La catalana, TV-3, tiene un presupuesto de 7.200 millones de pesetas y una previsión de ingresos por publicidad para este año de 3.300 millones de pesetas; el déficit, de casi 4.000 millones, será cubierto con cargo a los preslupuestos de la Generalitat. TV-3 tiene una plantilla de 600 trabajadoresy emite actualmente 55-57 horas semanales y una producción propia del 60%,, según los datos que ofreció Granados, que definió este canal como "una televisión que ve a Cataluña, a España y al mundo desde Cataluña".

Austeridad en Euskal Telebista

Euskal Telebista tiene una plantilla de 220 trabajadores -con una edad media de 25 años- y su presupuesto para 1985 es de 3.800 millones, de los que 2.600 corresponden a gastos de explotación y 1.200 millones a inversiones, según los datos facilitados por Andon¡ Areizaga. Emitirá este año 49 horas semanales, 26 de ellas como producción propia. Su audiencia, según dijo Areizaga, alcanza al 27% de la Comunidad de Euskadi; la audiencia infantil (de 4 a 14 años) asciende al 51,3% de esta población. Sobresale en esta televisión -implantada como cuarto canal- la austeridad en la gestión económica, ya que tiene una plantilla muy ajustada, en oposición a la catalana, cuyo diseño responde al de una televisión de mayor categona, si bien es cierto que la población catalana es tres veces superior a la vasca. Una de sus dificultades para captar audiencia y publicidad es la prioridad absoluta del euskera en las emisiones. Tanto Areizaga como Granados hicieron hincapié, con distintos matices, en que la lengua ha sido el principal factor diferenciador para reivindicar un canal de televisión, cuyos objetivos prioritarios son la normalización lingüística y cultura¡, argumentos que también resaltó la directora general de Medios de Comunicación de la Generalitat valenciana.