El Grupo popular se planteará la moción de censura si la explicación de Barrionuevo no le convence

El Grupo Popular barajará la posibilidad de presentar una moción de censura al Gobierno de Felipe González si las explicaciones de José Barrionuevo, ministro del Interior, sobre el espionaje policial a Alianza Popular (AP) no son consistentes, ya que hasta la fecha todas las respuestas fuera del Parlamento han sido "insatisfactorias". José María Ruiz Gallardón, vicepresidente de AP, dijo que la posibilidad de presentar una moción de censura al Gobierno "está presente e implícita" en este caso, aunque no fue uno de los temas tratados ayer por el comité ejecutivo del partido.Ruiz Gallardón se mostró tremendamente reservado, y no quiso adelantar ningún posible acuerdo de su partido frente al Gobierno, o el Ministerio del Interior, en concreto, sobre el espionaje a que ha sido sometida AP por funcionarios de la Brigada de Información Interior, dependiente del comisario Alberto Elías, funcionario actualmente procesado por otro escándalo: las escuchas telefónicas al matrimonio Sabater (relacionado con José María Ruiz-Mateos, ex propietario de Rumasa).

El vicepresidente de AP anunció que el presidente del partido, Manuel Fraga, dispone de un voluminoso informe sobre el espionaje sufrido por su organización -"espionaje político", según AP-, hecho del que tiene "el convencimiento absoluto". Precisó que contaba con cumplida información sobre el caso y, elpecialmente, sobre determinados hechos que no han trascendido aún y que no quiso revelar. Ruiz Gallardón más que adelantar información, lo que hizo fue provocar expectación ante la interpelación a que someterá Fraga a Barrionuevo mañana en la sesión de control parlamentario. "Sea cual fuere la respuesta de Barrionuevo", dijo, "Fraga tiene sus contraposiciones o contraofertas".

Barrionuevo, por su parte, no había recibido ayer aún la información ordenada por la Dirección General de la Policía sobre el espionaje y que instruye un comisario nombrado al efecto. Fuentes oficiales del departamento indicaron que esta información le será entregada al ministro para que tenga tiempo de preparar su respuesta a Fraga.

En el Ministerio del Interior había cierta tranquilidad ante la interpelación, sobre todo en núcleos de proximidad física al ministro, donde se respira cierto optimismo y existe el convencimiento de que el caso tendrá "una salida que no va a afectar en absoluto a la política del Gobierno". Medios próximos a las decisiones de Barrionuevo indicaron que este caso "se desinflará en los próximos días", frase ya adelantada por el propio ministro, y calificaron de exageradas las apreciaciones de Fraga comparando este escándalo con el Watergate.

La posibilidad de que se adopten medidas disciplinarías que lleven implícitas destituciones tampoco fueron descartadas, aunque lo que se pretende, según deducciones de los comentarios de las fuentes consultadas, es que "se castiguen los excesos de determinados funcionarios".

Esto interceptaría, según fuentes policiales, cualquier posibilidad de exigir responsabilidades políticas, que irían desde el comisario general de Información, Jesús Martínez Torres, hacia arriba. Las mismas fuentes indicaron que, según informaciones que circulan entre el funcionariado, lo máximo que se haría es destituir a Alberto Elías, aunque lo dudaron, dada la íntima relación que mantiene con Martínez Torres, quien le propuso como candidato tras la destitución, hace 23 meses, del anterior responsable de la Brigada, el subcomisario Mariano Baniandrés.