Finaliza el conflicto entre funcionarios y el Gobierno en Suecia
El conflicto que ha enfrentado durante 18 días al Estado sueco y al sindicato de funcionarios -del que 20.000 afiliados se encontraban en huelga desde el 2 de mayo- quedó solucionado en la madrugada de ayer al aceptarse la oferta de incremento salarial de un 2%. El tráfico aéreo, que también se encontraba paralizado, volvió a recuperar la normalidad durante la mañana de ayer, y lo mismo sucedió con el tráfico aduanero, bloqueado por la huelga de los aduaneros.
Los funcionarios, que reclamaban un incremento salarial del 3,1%, -rechazado por el Gobierno, al argumentar que ello descontrolaba la lucha contra la inflación-, aceptaron finalmente un aumento del 2%, que entrará en vigor a partir del 1 de diciembre próximo.
El desbloqueo de la situación se ha debido, en buena medida, a la intervención del primer ministro, el socialdemócrata Olof Palme. En el conflicto se han visto implicados aproximadamente 100.000 funcionarios, de los que 20.000 eran afiliados al sindicato de funcionarios.
Según estimaciones fiables recogidas por France Presse, el conflicto ha costado aproximadamente unos 1.000 millones de coronas suecas (unos 20.000 millones de pesetas) por día, y ha sido uno de los problemas más serios que ha conocido Suecia desde la guerra.
Este enfrentamiento entre sindicatos y Gobierno, que se ha producido a tan sólo cinco meses de las elecciones legislativas, de septiembre, podría tener influencia sobre el electorado, que, según un sondeo efectuado a fines de abril, antes de la huelga, parecía favorable a la unión de la izquierda (socialdemócratas y comunistas), con un 49,5%, contra el 46,5%. de la oposición conservadora. La política de férreo control de la inflación llevada a cabo por el Gobierno socialdemócrata ha suscitado fuertes críticas entre buena parte de sus potenciales votantes.
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