Encierro de 60 padres de deficientes para pedir subvenciones

El conflicto que enfrenta desde hace casi dos meses al sector mayoritario de la Asociación Asturiana de Protección a Subnormales (ADEPAS) con el actual presidente de la entidad, Gregorio Pérez Alonso -acusado por sus oponentes de "mala gestión económica" y de ser culpable del bloqueo de los 21 millones de pesetas que les adeuda la Administración, en concepto de subvenciones- continúa sin resolverse. Un grupo de 60 padres de muchachos subnormales prosiguen su encierro, desde el pasado día 9 en la sede de la asociación en Oviedo para exigir las subvenciones.

Gregorio Pérez Alonso fue requerido el lunes pasado por el consejero de Trabajo y Acción Social del Principado, el socialista Ricardo Ulpiano Álvarez, "porque la Administración está dispuesta a hacer efectivo el dinero, pero antes tiene que saber quién representa legalmente a esta asociación, en cuyos problemas internos no podemos ni queremos entrar", señaló. Los padres, por su parte, afirman que si el próximo lunes no se han desbloqueado las cuentas, iniciarán acciones en la calle. Pérez Alonso asegura, sin embargo, que no abandonará el cargo, salvo que se lo indique la autoridad judicial, ante la que ya han recurrido sus detractores que piden su dimisión.