Miembros de lzquierda Castreña, detenidos por agredir al alcalde de Castro Urdiales

El alcalde de Castro Urdiales, el socialista Francisco Gómez de la Garma, y Rosario Cruz, propietaria de un bar de dicha localidad, resultaron con heridas de diversa consideración en la madrugada del pasado jueves al ser agredidos violentamente por miembros de la coalición Izquierda Castreña Unida (ICU), grupo afín ideológicamente a Herri Batasuna. Entre los agresores se encontraba el concejal por dicha coalición Joaquín Díaz Munio, médico. Todos los agresores fueron detenidos horas después de producirse los hechos. El concejal fue detenido ayer a mediodía en su domicilio, y junto a los anteriores fue trasladado, al juzgado de Laredo.

Fuerzas de la Guardia Civil procedieron a primeras horas de la mañana de ayer a detener a los hermanos Ambrosio y José Riaño Real y a Manuel Liaño, todos ellos vinculados a ICU como presuntos autores de la agresión de que había sido objeto horas antes el alcalde castreño Gómez de la Garma. Díaz Munio, concejal del Ayuntamiento de dicha localidad cántabra por ICU, no pudo ser localizado en un primer momento, al parecer por encontrarse en la residencia sanitaria de Cruces (Vizcaya), donde trabaja.El incidente que, al parecer, tiene origen en el desalojo de una familia deshauciada de su domicilio y que permaneció una semana encerrada en el ayunta miento, se inició cuando el alcalde se dirigía, pasadas las doce de la noche del jueves, a tomar un taxi para acudir a su domicilio, tras descubrir que las cuatro ruedas de su vehículo particular habían sido pinchadas intencionadamente. En ese momento fue abordado por los agresores, que sin mediar palabra comenzaron a golpearlo, según relató ayer en conferencia de prensa el alcalde Gómez de la Garma.

Según el alcalde de Castro, al intentar refugiarse en el bar El Rebanal, desde donde pretendía pedir ayuda a la Policía Municipal, los agresores penetraron tras él, golpeándolo de nuevo y derribándolo al suelo. Igualmente fue agredida la dueña del bar, Rosario Cruz que tuvo que ser atendida en el servicio de urgencias de la villa tras resultar con un brazo roto y una herida que necesitó 20 puntos de sutura.

Ayer la tensión en Castro Urdiales -población que cuenta con 13.000 habitantes- era patente. Se esperaba con temor la reacción de los militantes y simpatizantes de ICU tras conocerse la detención de algunos de sus miembros. La coalición cuenta con tres de los 17 concejales de la corporación, y hasta hace un año mantenía un pacto de gobierno con el PSOE.