_
_
_
_

Estados Unidos incrementa su apoyo a la guerrilla camboyana no comunista

La resistencia camboyana no comunista puede ver incrementada la ayuda económica por parte de Estados Unidos, sin excluir el eventual suministro de armas, según se anunció en Washington al término de una entrevista celebrada el pasado miércoles entre el secretario norteamericano dé Estado, George Shultz, y los responsables de la guerrilla jemer no comunista, Son Sann y Norodom Ranaridib, hijo del príncipe Norodom Sihanuk, cabeza visible de todos los grupos de oposición al régimen de Phnom Penh.

"He venido para recibir toda la ayuda posible por parte de Estados Unidos y estoy muy optimista" dijo Son Sann, ex, primer ministro de Camboya 31 presidente del Frente de Liberación Nacional del Pueblo Jemer (KPLNF). "Estamos convencidos de que las fuerzas de la resistencia no necesitan por el momento armas norteamericanas, pero no creemos que sea prudente excluir toda la flexibilidad necesaria al respecto si cambiaran las circunstancias" declaró, por parte estadounidense, Edward Djerejian, portavoz del Departamento de Estado.

Hasta el momento, Estados Unidos se ha limitado a facilitar ayuda humanitaria y económica a los grupos no comunistas de la resistencia de la que quedan excluidos los célebres miembros de la guerrilla comunista de los jemeres rojos- por intermedio del programa de Tailandia de ayuda a los refugiados.

Hace unos días una comisión del Congreso estadounidense aprobó la concesión de cinco millones de dólares (unos 875 millones de pesetas), todavía pendiente de la aprobación final del Congreso.

Es la primera vez que Estados Unidos evoca la posibilidad de suministrar armas a la resistencia camboyana, aunque la mayoría de observadores considera que )Washington desea excluir todo riesgo de que el conflicto camboyano adquiera matices de conflicto americano-vietnamita, a los 10 años del fin de la guerra del Vietnam.

Estados Unidos apoya las propuestas de paz que incluyen una retirada total de las tropas vietnamitas de territorio camboyano -evaluadas entre 150.000 y 170.000 soldados- y la celebración de elecciones libres, bajo un control internacional, para restablecer la independencia de Camboya.

Por otra parte, ayer se anunció en Bangkok que unos 23.000 refugiados camboyanos habían sido evacuados del campo de refugiados número 6, debido a los riesgos de ataques de la artillería vietnamita en la zona fronteriza entre Tailandia y Camboya.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_