Anulado por el Tribunal Constitucional el despido de una maestra expulsada por no ser católica

El Tribunal Constitucional ha reconocido en una sentencia el derecho a la libertad ideológica de los maestros, que no deben ser objeto de discriminación por sus creencias. La resolución establece la nulidad radical del despido -con readmisión obligatoria- de la maestra de EGB Pilar Sala, efectuado por la escuela Lestonnac, de Mollet del Vallès (Barcelona), dirigida por las monjas de la Compañía de María. El centro motivó el despido en el hecho de que la profesora no era católica.La carta de despido, extendida al término del curso 1981-1982, centró los términos del conflicto en estrictos motivos ideológicos, según declara la sentencia. La dirección de la escuela justificaba el despido afirmando que un profesor que no es católico no está en condiciones de cumplir con el ideario del centro. Casi tres años después, el alto tribunal ha resuelto que " el despido, causalmente ideológico, se convierte en injustificado por discriminatorio y contrario tanto a la libertad ideológica reconocida por el artículo 16.1 de la Constitución, corno a la expresa y, específica prohibición contenida en el artículo 17 del Estatuto de los Trabajadores"

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