30 presos de Alcalá-Meco se autolesionan en protesta por el régimen de aislamiento
Treinta internos del módulo 3 de la prisión de alta seguridad de Alcalá-Meco (Madrid) se autolesionaron ayer, al ingerir objetos metálicos, en protesta por el régimen de aislamiento que la Junta de Régimen Interno de la cárcel impuso tras las dos últimas muertes ocurridas en el recinto penitenciario, debidas a rencillas internas entre los presos, según denunció ayer el abogado Fernando Salas Vázquez, dos de cuyos defendidos se encuentran entre los autoheridos. En un comunicado, 26 de los treinta internos denuncian "la práctica de la tortura que impera en esta cárcel". Sin embargo, fuentes penitenciarias han negado la práctica de torturas, aunque han admitido la existencia de un expediente abierto por la Dirección General de Instituciones Penitenciarías por si "los hechos ocurridos pudiesen ser constitutivos de delito".
Por su parte, la sección sindical de Comisiones Obreras (CC OO) de Alcalá-Meco, mayoritaria en el centro penitenciario, ha señalado que en el citado módulo se encuentran "los internos más conflictivos- y que "en ningún momento han existido malos tratos, pese a las continuas provocaciones de los internos".
CC OO denunció ayer la agresión que recibieron dos funcionarios de prisiones el pasado día dos por parte de reclusos de la prisión de Alcalá-Meco.
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