Procesión 'clandestina' en Jumilla, sin permiso de la Iglesia
Un centenar de personas participó en la madrugada de ayer, en la localidad murciana de Jumilla, en una celebración de Semana Santa probablemente única en España: una procesión clandestina. Miembros de la Policía Municipal tuvieron que vigilar a los asistentes a la procesión, convocada por la asociación cultural Santísimo Cristo de las Ánimas. No se produjeron incidentes.
La junta central de hermandades de Jumilla y el obispado desautorizaron la procesión porque los promotores, sobre todo jóvenes profesionales y universitarios de Jumilla, se proponía sacar a cuatro jinetes a caballo portando alegorías sobre la muerte, y que los penitentes fueran revestidos con sudarios blancos de lino y visitaran el cementerio de la localidad para hacer partícipes de la celebración a los difuntos. La procesión salió sin caballos, pero visitó el cementerio.
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