Neves, en estado crítico tras dos nuevas operaciones
Tancredo Neves, de 75 años, presidente electo de Brasil, se encontraba en la madrugada del viernes en estado crítico, con graves problemas respiratorios, tras las dos nuevas intervenciones quirúrgicas a las que fue sometido. Éstas fueron la quinta y la sexta operaciones desde que fue intervenido por primera vez el pasado día 15, fecha en que debía tomar posesión como presidente de la República. La primera de las intervenciones tuvo por objetivo atacar dos focos infecciosos en la pared abdominal y la segunda extirparle una bolsa de pus, también en el abdomen.Antes de que Neves fuera llevado nuevamente a la mesa de operaciones el portavoz presidencial, Antonio Britto, había manifestado indirectamente que el enfermo empezaba a perder la batalla por la vida. La posibilidad de trasladarle a un centro hospitalario de Estados Unidos ha sido descartada por los médicos ante el agravamiento de su situación clínica.
Neves, que ha sido sometido a seis operaciones en el corto espacio de 20 días, había sufrido una ampliación de la infección que afecta a dos zonas del abdomen y a la parte superior de los pulmones. Los médicos practicaron ayer dos incisiones para determinar la gravedad y la evolución de los focos infecciosos abdominales y finalmente optaron por intervenir quirúrgicamente. Después tuvieron que volver a operarle tras fracasar en un intento de eliminar el pus mediante punción.
En el hospital de Sáo Paulo donde se encuentra internado Neves se teme que la situación degenere en una septicemia o infección generalizada, que fuentes médicas consideran posible por la pérdida de defensas orgánicas padecida por el presidente electo tras la larga serie de intervenciones.
Neves está sometido a un tratamiento intensivo de antibióticos de alto poder para combatir una infección que en los últimos días se ha vuelto incontrolable. El portavoz presidencial no ocultó que el equipo médico se ve imposibilitado de eliminar el foco infeccioso detectado hace una semana en la cicatriz de 20 centímetros de las tres primeras operaciones.
Uno de los médicos que asiste a Neves ha declarado que si el paciente logra superar la actual situación deberá ser intervenido nuevamente para cerrar las paredes abdominales externas, que permanecen abiertas desde la primera operación.
La esposa, Risoleta, hermanos, hijos y nietos del dirigente brasileño permanecen junto al enfermo, cuyo estado de salud mantiene en vilo al país. En Brasilia, el Gobierno, encabezado por el presidente en funciones, José Sarney, sigue con creciente preocupación las noticias que llegan desde el hospital de Sao Paulo.
