El financiero jerezano podría no llegar a ingresar en prisión en España, según su equipo de abogados

Crispín de Vicente, titular del bufete que dirige la defensa de José María Ruiz-Mateos, manifestó ayer sentirse "tranquilo desde el punto de vista legal" tras el fallo de la oberlandesgericht de Hesse, dadas "las escasas posibilidades que tiene mi defendido de ser condenado por los Tribunales españoles en razón a los delitos a que se refiere la extradición". Por esos presuntos delitos fueron procesados dos altos directivos de Rumasa, Luis Romero Agarrado y Manuel Sánchez Marín, procesamientos que fueron revocados por la Audiencia Nacional al entender que no existían pruebas periciales que aportaran indicios racionales de criminalidad.En virtud de ello, Crispín de Vicente deduce que "si los tribunales no han encontrado indicios de delito en los autores materiales, es dificil que lo encuentren en el inductor, que es de lo que podría ser acusado José María Ruiz-Mateos". Según el artículo 13 del Convenio Europeo de Extradición, de 1957, Ruiz-Mateos sólo puede ser procesado en España por los delitos a que se refiere el fallo del tribunal alemán. "La posibilidad de que condenen en España a José María Ruiz-Mateos es muy remota. Si no existen autores materiales, no pueden existir inductores".

El Codigo Penal español, en su articulo 303, en relacion con las figuras que marca el 302, castiga los delitos mercantiles de estafa con prisión menor (de 6 meses y un día a 6 años) y multa de 30.000 a 300.000 pesetas. Ello supone, según Crispín de Vicente, la práctica seguridad de la concesión de la libertad provisional, de forma que el empresario jerezano podría esperar en su chalet de Somosaguas la vista del juicio.

El abogado alemán Egon Geis, para quien el fallo del tribunal alemán es una "decisión perversa", manifestó ayer a este periódico desde Francfort, en tono de profunda irritación, que "vamos a presentar demanda ante el Tribunal Constitucional de la RFA, porque consideramos un atentado contra el orden público internacional el que se conceda la extradición por dos delitos que la Audiencia Nacional española ha considerado no probados, lo que fue una bofetada jurídica para el juez Lerga".

Con el fallo del tribunal alemán se han cumplido los temores del empresario jerezano. AnteaYer manifestaba su creencia en que una decisión "podía producirse en cualquier momento", puesto que los tres jueces, encabezados por el ponente Höckesteller, estaban "metidos a tope en el estudio del caso".

La rapidez de la decisión del tribunal, sin embargo, no ha dejado de sorprender. Los abogados de José María Ruiz Mateos se han mostrado optimistas hasta el último momento. "Veo esto cada vez mejor", señalaba anteayer José Luis de Vicente. José María Ruiz-Mateos, sin embargo, parecía mostrarse menos confiado. "Llevamos dos años en lo que hasta ahora no se ha ganado absolutamente nada, donde todo son fracasos y todo es ceder posiciones creo, además, que no se conseguirá nada".