En libertad todos los procesados en el sumario de la colza
La totalidad de los procesados en el sumario de la colza se encuentran ya en libertad, después de que el juez instructor Alfonso Barcala decretara ayer la libertad provisional sin fianza de los cinco últimos procesados que permanecían en prisión preventiva. Se trata de Juan Miguel y Fernando Bengoechea, que estaban encarcelados en la prisión de Martutene (San Sebastián), Elías Ferrero y Cándido Hernández Galán, presos en Carabanchel (Madrid), y Jorge Pich, preso en la Modelo de Barcelona. Al menos dos de las acusaciones particulares han anunciado ya que presentarán recurso contra la decisión del juez.Elías Ferrero y Cándido Hernández Galán burlaron a los periodistas que esperaban su salida de la cárcel al abandonar el recinto sobre las 13.30 horas en un furgón celular. Jorge Pich salió a última hora de ayer de la cárcel Modelo, debido a que el telegrama del juzgado se recibió primero en la prisión de Lérida, donde Pich estuvo internado hasta hace un mes. Los hermanos Bengoechea salieron de la cárcel de Martutene a las cinco de la tarde y declararon no encontrarse contentos, porque han pasado cuatro años en prisión siendo inocentes.
El juez decretó la libertad debido a que han transcurrido más de 30 meses de prisión preventiva y no se les puede aplicar la nueva reforma de la ley de Enjuiciamiento Criminal, que fija el período máximo de prisión preventiva en cuatro años.
A los acusados les ha sido retirado el carné de identidad, que ha sido sustituido por una cartulina a efectos de documentación. También les han sido aplicadas otras medidas, como presentación diaria en comisaría, para evitar que puedan sustraerse a la acción de la justicia.
Por otra parte, el juez ha incorporado al sumario un peritaje Judicial en el que se descalifican las tesis del doctor Antonio Muro, que achacaban a un pesticida la enfermedad presuntamente transmitida a través de determinadas partidas de tomate y otros componentes de ensalada tratados con el pesticida.
Además, las tesis de otro investigador, Luis Frontela, no prosperaron ante la Magistratura de Trabajo, que rechazó la demanda de un abogado que solicitaba una indemnización por la muerte de su esposa, víctima del síndrome tóxico según la investigación de Frontela. Página 21
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