El 'lobby' más importante de Washington
Gray and Company Public Communications International Inc., es una empresa de relaciones públicas, la más importante de Washington, y de lobby (grupo de presión autorizado), presidida por Robert Gray, un conocido republicano que ya trabajó con la Administración Eisenhower. Tiene excelentes relaciones con la Administración Reagan y con los hombres más próximos al presidente.El pasado 2 de febrero, Gray and Company firmó un contrato con el rey de Marruecos para promover la imagen y las relaciones públicas del monarca alauí en Estados Unidos. El contrato es por un mínimo de 360.000 dólares anuales y ha servido para la preparación de las fiestas del trono en Marrakech, celebradas hace unos días, donde fue condecorada por el rey la embajadora de Estados Unidos en la ONU, Jeanne Kirkpatrick, y a la que asistieron el enviado especial de Reagan, Vernon Walters, y otras personalidades norteamericanas.
El príncipe Talal Bil Abdul Aziz Al Saud, de la casa real saudí, es también cliente de Gray por 10.000 dólares al mes. El objetivo del contrato es promover la amistad entre Estados Unidos y Arabia Saudí. El millonario árabe Adnan Kashogi y la Kuwait Petroleum Corporation, así como la Liga de Estados Árabes se cuentan también entre los clientes de Gray. Los Gobiernos de Haití y Canadá, y las embajadas de Japón y Tailandia en Washington tienen también contratos de relaciones públicas firmados con esta empresa, que gestiona además la venta de airbus a la Pan American.
Carter L. Clews, la persona que en mayo de 1984 abrió la oficina de Gray en Madrid con el único objetivo, al parecer, de desarrollar el contrato realizado previamente con Unesa, dijo a EL PAIS que su misión en España era "trabajar calladamente con algunas empresas eléctricas".
Clews explicó que trató de buscar nuevos clientes y envió 4.000 cartas ofreciendo los servicios de relaciones públicas de la empresa. La firma americana no consiguió al parecer ningún otro contrato en España.
Clews aseguré que se habló de realizar el pasado mes de septiembre un seminario para diseñar un proyecto de trabajo para Unesa, que deseaba, al parecer, conseguir una legislación favorable a las eléctricas y evitar nacionalizaciones. Sin embargo, nunca se pasó a la fase operativa y ni Gray Madrid, ni tampoco la empresa de consultoría de Lasuén, Adicsa, realizaron ninguna labor concreta de relaciones públicas para el consorcio eléctrico privado.
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