Barrionuevo, contra la supresión de los juzgados centrales

El ministro del Interior, José Barrionuevo, se opuso a la supresión en la ley orgánica del Poder Judicial (LOPJ) de los juzgados centrales de instrucción dependientes de la Audiencia Nacional, a pesar de que el ministro de Justicia, Fernando Ledesma, había dado su aprobación a la eliminación de los mismos, solicitada por los portavoces del PNV, Marcos Vizcaya, y de Euskadiko Ezkerra, Juan María Bandrés. Ambos alegaron que los 500 kilómetros de distancia entre Madrid y Euskadi impiden la necesaria inmediación entre el juez y los detenidos vascos, en perjuicio de los derechos de éstos, y en concreto de la correcta aplicación del hábeas corpus.

Según Marcos Vizcaya, la oposición de Barrionuevo fue la explicación que le dio el Grupo Socialista para negarse a la supresión del artículo 97 del proyecto de LOPJ, en el que se establece que en Madrid "podrá haber uno o más juzgados enjuiciamiento corresponda a la Audiencia Nacional". El portavoz del PNV había pactado con el PSOE aceptar la Audiencia Nacional a cambio de la supresión de estos juzgados centrales, pero este acuerdo no prosperó por la resistencia de Barrionuevo, que, según la versión dada por los socialistas a Vizcaya, consideró que si las causas por terrorismo las instruyen los jueces en el País Vasco, "se verán sometidos a la influencia ambiental". Vizcaya muestra, en cambio, su satisfacción relativa por el esfuerzo realizado por el PSOE para superar el laconismo del proyecto de ley respecto a la institución del jurado.

La LOPJ adelanta que en la futura ley deberá concretarse que" la jurisdicción del jurado tendrá carácter obligatorio en los delitos perseguibles de oficio, y voluntario para los perseguibles a instancia de partes.