Sidney Janis
El galerista norteamericano estuvo por primera vez en Arco 85, atraído más por el público español que por el arte que aquí se produce
El galerista neoyorquino Sidney Janis ha participado este año por primera vez en Arco 85, presentando a un grupo de artistas del graffiti norteamericano en los seis stands que ocupa. Janis tomó la decisión de participar este año en esta feria internacional de arte porque se siente especialmente impresionado por el interés del joven público español en el arte contemporáneo. "Hay muchos artistas jóvenes aquí también, pero no veo por el momento algo que me llame mucho la atención. Lo que me ha seducido es el público visitante".
La pasión por lo joven y vigoroso en la cultura no parece ser para Sidney Janis cuestión de oportunismo. Desde que en 1926 decidió iniciarse en el coleccionismo con el primer dinero que ganó, Janis se ha mantenido al lado de todas las tendencias y artistas de vanguardia de nuestro siglo. "Nací en el siglo pasado", admite, sin querer dar a conocer su edad, "pero soy en todo sentido un hombre de este siglo"."Decidí venir a España este año con una muestra de mi galería porque hace dos años, cuando vine por primera vez trayendo la exposición de Mondrian, quedé vivamente impresionado con el público que acudió tan interesado a la muestra. Ahora ha pasado lo mismo con el graffiti. Los jóvenes vienen una y otra vez y parecen entusiasmados con los cuadros".
El primer cuadro que adquirió Janis fue un Matisse. Más tarde compró un Mondrian al propio artista por 70 dólares. "Hace poco me lo quisieron comprar por un millón de dólares y no quise venderlo", declaró. "Empecé como coleccionista con lo mejor y luego seguí hacia arriba. Cuando empiezas a vivir con un Matisse y lo usas como parámetro, es difícil retroceder hacia algo de inferior calidad. Fui incluyendo en mi colección obras de Picasso, Léger, Mondrian; luego los surrealistas, más tarde el pop y ahora el graffiti. Pero el criterio que siempre tuve fue el de pagar lo que sea por una buena obra y no estar buscando cuadros menos buenos por poco dinero".
Hubo un momento, en el año 19148, cuando Sidney Janis decidió cambiar su actividad de coleccionista para convertirse en galerista. "Fue una decisión que tardé mucho en tomar. Después de 22 años como coleccionista tenía. claro que lo importante es la calidad de las obras. La gente que iba a la galería pedía mucho la obra barata, pero eso no me interesaba. Por eso al principio fue muy difícil". Actualmente su galería en la Calle 57 de Nueva York es una de las más prestigiosas de esta ciudad, centro del arte actual.
"Siempre tuve claro que me interesaba el arte como admirador y no como artista. Luego sentí que la aproximación que tienes al arte como creador te obliga a concentrarte en una sola perspectiva. Yo no hubiera pasado de ser un artista mediocre. Mi aproximación siempre ha abarcado un espectro muy amplio, y no quise restringirlo", comentó Janis. "Tengo una gran colección de los más importantes artistas del siglo. Los conocí a todos, pero la mayoría ha muerto ya. Dalí está vivo todavía, y Chagall con 94 años, aunque yo nunca compré un Chagall. No me pareció de los mejores; es un artista ilustrativo muy bueno, pero nada. más. Un buen director de museo no compraría un Chagall".
"Me ha llamado la atención en esta feria la cantidad de obra neoexpresionista que hay", comenta Janis en relación a Arco 85. "Estoy sorprendido de no encontrar, por ejemplo, arte abstracto post-Mondrian".
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