El alcalde de Móstoles expedienta a 12 miembros del comité de empresa municipal
El alcalde de Móstoles, el socialista Bartolomé González, ha abierto expediente a 12 miembros del comité de empresa a raíz de los incidentes ocurridos el pasado día 15, cuando los representantes sindicales se negaron a abandonar las dependencias de la alcaldía hasta conseguir una entrevista con su titular. Según el presidente del comité de empresa, Manuel Corpa, que pertenece a Comisiones Obreras, "la actual corporación tiene una actitud general represiva hacia los trabajadores municipales".Los cargos que en la notificación del expediente se imputan a los miembros del comité, en el que CC OO tiene la mayoría, son los de manifestarse en grupo y sin autorización, resistencia y desobediencia a los agentes de policía e introducirse por la fuerza en las dependencias de la alcaldía.
Corpa aseguró que el alcalde se niega de forma sistemática a recibir al comité de empresa y que, ante el más mínimo incidente, hace uso "de una prepotencia que siempre justifica en el hecho de haber obtenido la mayoría de los votos de los ciudadanos de Móstoles".
Bartolomé González explicó, a su vez, que existe un concejal delegado encargado de las relaciones laborales. "Lo que no puedo hacer", dijo el alcalde, "es dedicarme a resolver los problemas de una determinada sección sindical porque para eso está el concejal de Personal, que los ha recibido siempre que se lo han solicitado".
"Demasiados expedientes"
Manuel Corpa aseguró que durante los meses de enero y febrero de este año se ha expedientado o sancionado a 70 trabajadores de la plantilla del Ayuntamiento, que se acerca al millar de empleados. Según Corpa, se han impuesto sanciones por causas como negarse a ir a trabajar fuera de las horas que les corresponden o en día de libranza. Esta información fue desmentida por el alcalde, que afirmó que no se ha sancionado a ningún empleado desde 1979.Respecto a los incidentes ocurridos el pasado día 15, el alcalde de Móstoles declaró que el grupo de representantes sindicales había entrado por la fuerza en las dependencias de la alcaldía. "Tuve que salir", añade González, "de una reunión del gabinete de gobierno a causa del escándalo que estaban armando y, ante su negativa a abandonar la casa consistorial, reclamé la ayuda de la Policía Municipal para que los desalojaran". Los miembros de Comisiones Obreras aseguran que se concentraron de forma pacífica en el pasillo de acceso a la alcaldía, que lo único que pidieron fue ver al alcalde y que pronunciaron frases como "¡Queremos negociar!", ¡Expedientes, no!".
