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COPA DE EUROPA DE BALONCESTO

El Madrid intentara vencer hoy al Maccahi de Tel Aviv por as de cuatro puntos

Luis Gómez

El Real Madrid juega hoy ante el Maccabi de Tel Aviv (siete de la tarde, TVE-1) y necesita la victoria para seguir aspirando a la final de la Copa de Europa de baloncesto. El resultado deseable sería aquél que rebasara la ventaja de cuatro puntos, ya que en Israel el Madrid perdió por 101-97. Los jugadores del Maccabi simulan entreguismo. El conocido Magee no está lesionado. El Cibona ganó ayer en Zagreb al Granarolo de Bolonia por 96-89.

Llega el Maccabi a Madrid con circunstancias a favor y en contra. A favor tiene el hecho de que se trata de un encuentro en el que pocas cosas tiene que perder. Si gana en el pabellón, el Maccabi puede considerarse finalista, pero si pierde tendrá otras oportunidades de obtener su segunda victoria a domicilio, requisito imprescindible para asegurarse un puesto en la final. Circunstancia desfavorable no sufre otra que la de llevar inactivo casi tres semanas. Desde el 31 de enero el equipo no ha jugado más que un encuentro de Liga, el sábado pasado, debido a las obligaciones de la selección de Israel con motivo de la clasificación para el Mundial 86 de España. Los problemas que lleva padeciendo Magee en un tobillo no impidieron que este jugador anotara 23 puntos.El técnico del equipo, Zvi Sherf, que no parece un gran estratega, sino simplemente un hombre duro y partidario de la disciplina, se limita a practicar la misma táctica conformista que suele usar el Real Madrid en sus encuentros en Tel Aviv. Hasta el momento, ambos clubes se conforman con no ganar en el terreno del adversario. Así, Sherf` no parece, en sus declaraciones, contar con la posibilidad de una victoria en el pabellón.

El Maccabi se presenta en Madrid con tres nombres, más que un equipo, y algunos apellidos ilustres que aún se resisten a. la jubilación. Los nombres son Lee Johnson y Kevin Magee, las dos estrellas norteamericanas, y el incombustible Berkowitz, el mejor deportista israelí. Estos tres jugadores marcan la personalidad del equipo, es decir poder reboteador y preferencia de juego ofensivo. Les acompañan Aroesti, Silver, Lasoff y Perry, pero más que nada como veteranos colaboradores.

"Utilizaremos ante el Maccabi una táctica muy similar a la que pusimos en práctica en Tel Aviv, es decir marcar a los dos pivots por delante para que no tengan demasiadas opciones de recibir el balón", dice Lolo Sainz, que no oculta que su equipo juega peor en su cancha que en la ajena. Sobre el juego de Jackson, tranquiliza: "Si me fijo en las estadísticas, resulta que Jackson está tirando este año mejor desde fuera que el pasado. He hablado con él y no le sucede nada en especial. Lo que pasa es que es un puesto, el del alero alto, para el que sólo contamos con este jugador. Goza de toda mi confianza".

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