La decisión oficial sobre Peciña se retrasa al menos dos semanas

El secretario de Prensa del Consejo Supremo Militar de Nigeria, Wada Maida, arírmó ayer que este organismo no ha estudiado aún la conmutación de la pena de muerte dictada contra el capitán del petrolero Izarra, el español José Luis Peciña, lo que retrasa al menos dos semanas una decisión formal al respecto. Asimismo negó que Peciña se encontrara entre los 2.500 indultados el pasado lunes.

En sus declaraciones, hechas a la agencia británica Reuter, Wada Maida justificó el hecho de que Peciña no se encontrara en la lista de 2.500 indultados basándose en que ésta se elaboró sólo con nombres de presos que cumplían sentencia firme, lo que no es el caso del capitán del Izarra, cuya sentencia aún ha de ser confirmada, o rechazada, por el Consejo Supremo Militar. El portavoz nigeriano afirmó que el Consejo aún no había estudiado la sentencia contra el capitán.Es ésta la primera confirmación de que el órgano supremo del régimen militar nigeriano no se planteó el asunto en su reunión del jueves pasado, por lo que habrá aún que esperar dos semanas más, hasta que se celebre una nueva sesión. Maida salía así al paso de las informaciones dadas ayer por la mañana según las cuales Peciña -condenado a muerte el pasado 10 de diciembre junto a dos ciudadanos nigerianos por contrabando de gasóleo valorado en más de 500 millones de pesetas- había sido indultado.

Fue el abogado de Peciña, el nigeriano Jimi Oduba, quien indujo al error, al telefonear ayer por la mañana desde Londres al subdirector general de Asuntos Consulares de España, Vicente Ramírez Montesinos, y asegurarle que Pecifia se encontraba entre los indultados.

A juicio de diplomáticos españoles, el error de Oduba -un prestigioso abogado nigeriano que cobra más de medio millón de pesetas por día de trabajo- podía estar motivado por encontrarse estos días fuera de Lagos.

Desde Bilbao, María del Mar Peciña, hija del capitán del Izarra, declaró a EL PAIS que su padre "se encontraba ahora mejor, después de pasar unos días malos", decepcionado por no haber sido incluido en las listas de indultados. Entretanto, se le sigue aplicando el reglamento de visitas, y se le permite recibir a su mujer durante 20 minutos sólo tres veces por semana.