El traslado de 35 presos psicopatas de la cárcel de Huesca provoca protestas en Alicante

El anuncio del próximo traslado de 35 presos de la cárcel de huesca catalogados como psicópatas a un módulo especial del sanatorio psiquiátrico de fontcalent, en alicante, ha motivado una serie de protestas y la oposición de algunos sectores de aquella ciudad. fuentes del centro de huesca señalaron ayer a este periódico que aún no está concretada la fecha en que se llevará a cabo el traslado y que no son exactos algunos datos que se barajan en alicante: no serán 70 u 80 los internos que vayan desde huesca, sino 35.

"El tema se reduce a una orden de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias que hay que cumplir; creíamos que los planteainientos estaban ya asumidos en Alicante", señalaron las fuentes citadas.La citada orden partió a raíz de un informe elaborado por la Asoc¡ación pro Derechos Humanos, que visitó la cárce`, de Huesca el ines de octubre de 1983, y los reafizados posteriormente por una cornisión del Senado, que dictaminaron que la citada círcel no reunía las condiciones necesarias para albergar los reclusos con problemas psíquicos. El director general de Instituciones Penitenciarias, Juan José Martínez Zato, visitó el centro y comprobó la escasez de medios del mismo, poi lo que se acordó trasladar a los psicópatas a uno de los pueblos del hospital de Alicante, ubicado próximo al centro penitenciario doncle cumple sentencia el resto de los reclusos. Las obras previstas en el módulo están ya terminadas por lo que se aseguraba que el traslado iba a ser inminente, "pero aún no está decidida la fecha".

Las protestas de Alicante están motivadas, en parte, por la falta de medidas de seguridad así como de personal especializado para el tratamiento de este tipo de reclusos. Además, el supuesto grado de conflictividad de los presos de la cárcel de Huesca, unido al intento de fuga de los internos de Alicante la pasada Nochebu.ena, tras tomar como rehenes a lit directora e la prisión y a una de las doctoras, han hecho que aumenten los recelos sobre la llegada de los nuevos reclusos. La conflictividad en la cárcel de Huesca ha sido menor en los últimos meses, según fuentes de la dirección, que señalaron que en las últimas fiestas navideñas disfrutaron permiso 22 internos, entre ellos algún psicópata. Estas mismas fuentes añadieron que no es cierto que se hubieran autolesionado dos presos y que huyeran del hospital psiquiátrico. El último incidente se produjo el mes de noviembre pasado cuando un preso que sufría trastornos depresivos se fugó del hospital, a donde había sido trasladado por orden del médico, tras burlar la vigilancia de los policías que lo custodiaban.