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El barco fantasma busca el paraíso perdido

La bolsa española, al contrario de aquel filme que iba del rosa al amarillo, prefiere moverse de una manera mucho más drástica: del negro más absoluto al blanco más radiante. Ésa era la impresión que dio el mercado el pasado lunes y que se repitió ayer, aunque de una manera más suave.El hecho de que el Banco Hispano Americano haya cosechado 85.689 títulos a la compra, lo que le ha permitido subir tres enteros en Madrid y dos en Barcelona y Valencia (donde se asegura que había dinero al cierre para esta entidad), sorprendió a los operadores, quienes ya se habían extrañado por la afirmación realizada en el último telediario del lunes por la segunda cadena de que este banco recibiría al día siguiente órdenes de compra. La Bolsa de Bilbao, donde los títulos bancarios son contratados más libremente, fue prudente, y allí el Hispano se limitó a repetir cambio.

"Las cosas de la caja", comentaron ayer los más y los menos. Pero lo cierto es que el corro de los siete grandes parece haber asumido la tormenta del dividendo, ya que la entidad más libre del grupo, el Popular, se permitió el lujo de presentar 6.238 títulos a la venta y bajar cuatro enteros con la máxima tranquilidad. Una señal de que los grandes consideran que ya ha pasado el tiempo de dar obligadas pruebas de fortaleza.

Realmente, la magnitud de los saldos de las operaciones por caja permite albergar bastante optimismo: 116.438 títulos a la compra y 68.843 a la venta, lo que supone un saldo positivo de 47.595 acciones. Excepto la comentada pérdida del Popular, el resto de los seis grandes obtuvo signos positivos o repeticiones.

Y una vez que el protagonismo bancario -aunque haya sido para mal- comienza a no inquietar a los operadores, la estabilización del mercado permite centrar la atención en otros sectores que, de manera indirecta, también han sufrido los efectos del nerviosismo de días pasados. Las eléctricas, por ejemplo, dieron ayer muestra de gran resistencia, al mantener las ganancias del lunes y además subir otros dos puntos en su índice particular.

A pesar de ello y de que bastantes analistas prosiguen apostando sin reservas por estos valores, unos pocos comienzan a preguntarse cuál será el comportamiento del sector el día en que se anuncie oficialmente el acuerdo sobre ventas de activos y reparto de mercados. Y no falta quien recuerde ese viejo axioma bursátil que recomienda comprar con el rumor y vender con la noticia.

Anuncios oficiales fueron, en otro orden de cosas, la ampliación de Forjas Alavesas por 2.000 millones de pesetas, en una emisión totalmente liberada con cargo a la cuenta de regularización, y en la proporción de una acción nueva por cada una antigua. También Inmobiliaria Electra anunció oficialmente otra ampliación por 68,4 millones de pesetas, en una emisión liberada con cargo a la cuenta de regularización y en la proporción de seis acciones nuevas por cada cinco antiguas. Las dos operaciones se desarrollarán del 20 del mes actual al 20 de enero de 1985.

Los analistas consideran que la bolsa presenta un perfil más atractivo que incluso antes del tema Hispano. No es descartable que en estos días salgan al mercado las lógicas realizaciones de beneficios de jornadas anteriores, pero la existencia de un fondo de resistencia en torno al 137% parece dar la razón a los técnicos.

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