Roca prometió, sin autorización, subvenciones de 1.500 millones

José Luis Roca prometió la construcción de al menos 297 instalaciones deportivas con derecho a subvenciones, sin autorización para ello y por un montante global que puede evaluarse en más de 1.500 millones de pesetas. Roca presidió hasta la actualidad la Comisión Nacional de Campos. Dichos compromisos no pueden ser atendidos, pero, según algunos presidentes de clubes modestos, han podido servir al candidato para granjearse adhesiones.Estos compromisos motivaron en su día que clubes, ayuntamientos y federaciones territoriales iniciaran unas obras confiando en la que tendrían una subvención, hecho que no se producirá. En el Consejo Superior de Deportes (CSD) existe el temor de que tales expectativas acaben en una protesta ante la Administración por no otorgar las subvenciones que se han prometido. Sin embargo, el CSD no ha adquirido estos compromisos y sólo ha comenzado atener conocimiento de la existencia de una serie de promesas. El número de éstas que haya hecho efectiva José Luis Roca o el equipo que dirigía en la federación no se ha podido evaluar en su conjunto. Sólo se tiene conocimiento de 297 expedientes de instalaciones procedentes de la Federación Española de Fútbol, de los que en 273 no consta su aprobación.

El aluvión de promesas se produjo a raíz de la firma, por parte del anterior secretario de Estado para el Deporte, Jesús Hermida -el 23 de marzo de 1982- de un plan trienal de construcciones, en el que se reservaba una serie de cantidades para cada federación. A la de fútbol le correspondían un total de 1.200 millones, a distribuir en tres años según el siguiente desglose: 375 millones en 1982,400 en 1983 y 425 en 1984. En 1982 Roca compromete obras por 586 millones, de los que 108 millones son para construcción de videomarcadores en Valencia, Bilbao, Zaragoza y Madrid, cantidad aprobada por el CSI) pero que luego, en una auditoría efectuada por la Intervención General de Estado, resultó dudosa, ya que existían evidencias de que el dinero se empleó para otros fines o las obras estaban sobrevaloradas.

El 13 de julio de 1983, el actual equipo de Romá Cuyás, secretario de Estado para el Deporte, comunicó a la federación que, en virtud de una enmienda parlamentaria, no había ya asignación para instalaciones. Era el fin del citado plan trienal. Aun así, la federación ya se había comprometido en la realización de obras por valor de 83.375.000 pesetas, de las que 50 millones correspondían a la construcción de un videomarcador en el estadio del Cádiz.

Se tiene constancia de la existencia de 80 expedientes de obras bajo la propiedad de ayuntamientos, por valor de 266.429.492 pesetas, y de 75 a clubes, de los cuales 22 tienen un valor de 87.123.111 pesetas y de 53 se desconoce su valor. Éstas son obras en las que no consta aprobación de la Federación Española de Fútbol. Hay constancia, por otro lado, de 12 expedientes por valor de 118.162.316 pesetas para ayuntamientos y 47 para clubes, sin valoración, en los que también se están haciendo obras que no aprobadas.