La URSS y Bulgaria por la supremacía en la gimnasia rítmica

El IV Campeonato del Mundo de Gimnasia Rítmica y Deportiva, que comienza hoy en Viena, quedará limitado, como es habitual en esta especialidad únicamente femenina, a un enfrentamiento entre Bulgaria y la URSS. España envía a sus dos mejores gimnastas, las olímpicas Marta Bobo y Marta Cantón, aunque la primera acude en baja forma porque acaba de salir de una lesión. España está en el grupo de elite situado inmediatamente después de los dos países favoritos. El próximo campeonato mundial se disputará en Valladolid.

La gimnasia rítmica, totalmente devaluada en Los Ángeles en su debú olímpico, debido al boicoteo de los países socialistas, reencontrará en Viena a todas sus estrellas bulgaras y soviéticas. Este formidable enfrentamiento entre los dos países relegará a todas las demás participantes a un segundo plano.En los campeonatos de Europa de 1982, en Stavanger (Noruega), la URSS contuvo el empuje búlgaro compartiendo los títulos. En los campeonatos del mundo de 1983, en Estrasburgo (Francia), las soviéticas fueron prácticamente barridas Bulgaria, encabezada por la escultural Diliana Queorguiva, ganó cuatro de los seis títulos y 14 de las 21 medallas.

Para las soviéticas, que alinearán un trío de talento con Dalia. Kutkaite, actual campeona de Europa, Galina Beloglazova y la joven Tatiana Drutchinina, estos campeonatos tienen como signo de identidad la revancha. Una revancha dificil, porque en su camino encontrarán a Annelia Ralenkova, que comparte el título europeo con Kutkaite, Gueorguiva, campeona del mundo, y Liliana Ignatova, campeona del mundo en los aparatos de mazas y pelota. Catorce equipos participarán en la prueba por equipos, que también vivirá un duelo entre Bulgaria, campeona del mundo, y la URSS, campeona europea.

Detrás de los dos grandes aparecen Checoslovaquia, con Daniela Zahorovska; Rumania, con Doina Staiculescu, subcampeona olímpica; Alemania Occidental, con Regina Weber, y España, con Marta Bobo y Marta Cantón.