Sáenz de Santa María pasa hoy a la 'situácion B', pero continúa al frente de la Guardia Civil

El teniente general José Antonio Sáenz de Santa María y Tinturé, pasa hoy, por razón de edad, a la situación B, de destino de Arma o Cuerpo, pero continuará ejerciendo el cargo de director general de la Guardia Civil, hecho que se produce por primera vez en la historia de ese Cuerpo. Los generales del Ejército que, siendo directores de la Guardia Civil, pasaron a la situación B, siempre fueron apartados automáticamente del cargo, bien por decisión del Gobierno en los últimos años, o porque la legislación anterior exigía que los directores de la Guardia Civil fueran generales en activo.Con su pase a la situación B, el general Sáenz de Santa María, que el próximo día 15 de diciembre cumplirá 65 años de edad, abandona la situación activa en el Ejército y, por tanto, no podrá tener mando directo sobre tropas. Sin embargo, el cargo de director general de la Guardia Civil está regulado por una legislación diferente a la relativa a los destinos de los generales en el Ejército de Tierra.

La ley de 1940 referente a la organización de la Guardia Civil señalaba que el director del Cuerpo debía ser un general del Ejército de Tierra. En el decreto de 1975 se especificó que el destino tenía que recaer sobre un teniente general, máxima graduación de la carrera militar. En el decreto de creación del Ministerio de Defensa de 1977 se especifican más las condiciones para ocupar el cargo, ya que se dice que el mismo deberá corresponder a un teniente general en situación activa, es decir, a un teniente general del Grupo de Mando de Armas que, por tanto, no hubiera pasado a la situación B.

Si este decreto estuviera vigente hoy, el general Sáenz de Santa María no hubiera podido seguir al frente de la Guardia Civil. Sin embargo, la condición impuesta en 1977 sobre la situación de actividad quedó derogada este mismo año, con la aprobación del decreto de reestructuración del Ministerio de Defensa, en el que simplemente se indica que el director de la Guardia Civil será nombrado por el Consejo de Ministros, a propuesta de los titulares de Defensa e Interior.

Por tanto, y de acuerdo con la legislación actual, el general pasa hoy a la situación B -y en este sentido será publicado en el Boletín Oficial del Estado el correspondiente decreto del Ministerio de Defensa-, pero es al Gobierno, a propuesta de los ministros de Defensa e Interior, al que corresponde, independientemente de la situación militar concreta del afectado, decidir cuándo abandonará su cargo de director general.

Con esta normativa, también ha quedado abierta la puerta para que, en un futuro, el director del Cuerpo pueda ser una persona no militar.

Con la decisión del Gobierno de que Sáenz de Santa María continúe al frente de la Guardia Civil se restringen aún más las posibilidades de ascenso a teniente general de los actuales generales de división integrantes de la primera promoción de la Academia General Militar, motivo por el que algunos altos jefes militares ya habían expresado hace varios meses su deseo de que el actual director de la Guardia Civil abandonara su cargo cuando pasara a la B.

Destinos conflictivos

Sáenz de Santa María ha sido el general que ha tenido los destinos más conflictivos a lo largo de toda la transición democrática. En estos años ha sido jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil, general inspector de la Policía Nacional, delegado especial del Gobierno para la seguridad en el País Vasco, capitán general de Valladolid, capitán general de Barcelona y director general de la Guardia Civil.