¿Paz en El Salvador?

( ... ) Duarte, desde el foro de las Naciones Unidas, manifestó que conversaciones sin condiciones pueden comenzar la semana próxima en La Palma, una ciudad situada en el territorio de la guerrilla, cerca de la frontera hondureña. La guerrilla acepta la propuesta si asiste un observador neutral. ( ... ) En esta oferta para terminar la guerra civil, Duarte promete a los izquierdistas nuevas posibilidades, no sólo en las elecciones locales, que habían rechazado, sino quizá en un plebiscito nacional. A las peticiones de la izquierda sobre garantías de seguridad y participación en el régimen interno preelectoral, Duarte responde con la promesa de seguridad y de ocupar una plaza dentro del sistema democrático, pluralista, constitucional, o un posible papel en el Gobierno, más una amnistía general.Hasta el momento, Duarte afirmaba que estaba dispuesto a hablar, pero no a negociar. Sus nuevas propuestas parecen una ayuda para la negociación y ha demostrado gozar de cierta autoridad sobre los escuadrones de la muerte, de extrema derecha.

La actitud de Duarte concuerda con el espíritu del tratado de paz regional propuesto por los países de Contadora y cuenta con el apoyo de Europa, que ha obtenido en estos últimos meses. La aceptación por parte de Nicaragua de ese tratado se puede convertir en un factor favorable en los cálculos salvadoreños. Claro está, hay duros en las fuerzas armadas salvadoreñas que, sintiendo frustrada su victoria sobre la guerrilla, pueden hacer fracasar el proyecto de Duarte. ( ... ).

10 de octubre