El 'Challenger' inicia mañana una misión con la tripulación más numerosa de la historia

El transbordador espacial norteamericano Challenger iniciará mañana una nueva misión, de ocho días de duración, llevando a bordo siete cosmonautas, la tripulación más numerosa de la historia de los vuelos espaciales, de la que forman parte dos mujeres -Sally Ride y Kathryn Sullivan- y el primer astronauta de nacionalidad canadiense, Marc Garneau. Este vuelo, el decimotercero de un transbordador, tiene como objetivo principal el estudio de la Tierra y los océanos, en lo que constituye el programa más ambicioso de este tipo desde el emprendido por el laboratorio espacial Skylab hace 10 años.Ocho horas después del lanzamiento, que se realizará a la una de la madrugada, hora local de Cabo Cañaveral (Florida), seis de la madrugada en España, está previsto que la tripulación del Challenger deje en el espacio un satélite de observación de la radiación .terrestre, el ERB S,. equipado con instrumentos que permitirán medir la radiación solar reflejada por la Tierra.

La agencia espacial norteamericana (NASA) y diversos organismos científicos norteamericanos tienen grandes esperanzas en los resultados de esta investigación para comprender los cambios climáticos.

Con siete astronautas a bordo, dos de ellos mujeres, la falta de espacio constituirá un verdadero problema durante la misión, como ha comentado el comandante, el veterano Robert Crippen. Será la primera vez que viajen juntas dos mujeres astronautas. Sally Ride ya lo hizo en un vuelo anterior del Challenger, en junio de 1983, mientras que es la primera experiencia para Kathryn Suilivan, que se convertirá en la primera mujer norte americana que realice un paseo espacial, y la segunda del mundo, después de la soviética Svetlana Savitskaya. Sullivan, junto con otro miembro de la tripulación, David Leetsma, realizará en la bodega, de carga del transbordador experimentos de transferencia del combustible utilizado en los motores de altitud de los satélites de un depósito a otro. Estos experimentos son importantes de cara a los proyectos de la NASA para el año 1987, en que intentará reponer el combustible de determinados satélites sin moverlos de su posición orbital.