Cuatro pasos adelante y un paso atrás

La bolsa apostó desde el inicio de la semana por una tendencia alcista, que se fue consolidando a medida que transcurrían las sesiones. Día tras día se pulverizaba el récord anterior, y fue necesario esperar al viernes para presenciar la aparición de órdenes de venta, que a duras penas pudieron contener una subida que comenzaba a ser rutina.Estas realizaciones de beneficios, por otra parte, no dejaban de ser esperadas al final de la tanda semanal. Lo que sorprendió a los operadores fue la relativa facilidad con que el mercado absorbió las ventas. En opinión de los expertos, ese hecho demuestra la existencia de un volumen considerble de dinero que espera a entrar en el mercado en cuanto salga papel a la venta a buen precio. Este lago subterráneo de efectivo constituye un apreciable fondo de resistencia.

El mercado se enfrenta en estos momentos a una serie de factores que influyen positivamente en la evolución de los cambios.. El elemento más ponderado ha sido el descenso de los tipos de interés, que ha supuesto una reducción en el precio del dinero y que ha tenido efectos negativos sobre las retribuciones de determinadas inversiones tradicionales. En unos momentos en que la bolsa registra una ganancia media del 45%. desde principios de año, la inversión en renta variable se ha convertido en la más llamativa de todas.

Los bolsistas han sopesado estas expectativas cuidadosamente, ya que se puede comprobar que cada vez existe una mejor formación sobre la manera de operar en el mercado, con mayor énfasis un los análisis técnicos y económicos que en aquellos otros de tipo psicológico. Por esta razón, la próxima firma del pacto social, que debe tener una repercusión favorable en la marcha de las empresas, es uno de los acontecimientos que también han fomentado la tendencia alcista.

En estas condiciones, el comportamiento de los pesos pesados de la bolsa ha sido notoriamente dispar. Quizá los bancos hayan sido los que han dado la nota más disonante, ya que muchos operadores habían previsto que este corro realizase un nuevo tirón alcista. Pero no ha sido así. Estas entidades esperan una mejor oportunidad y, en todo caso, parecen no querer ningún tipo de protagonismo bursátil por ahora, posiblemente por el inmitiente. canje de bonos o para no coincidir en el tiempo con la rebaja en las retribuciones de sus pasivos.

Los valores eléctricos, por su parte, han dirigido las sesiones y han marcado la tendencia positiva. Lógicamente, al final han sido también los que han tenido que soportar un nivel de realizaciones más elevado, pero continúan en buena posición. Sólo hay que observar el barómetro de las compras a crédito, que se dirigen hacia este sector de forma mayoritaria.