Gobierno, CEOE y UGT han negociado en secreto el pacto para 1985-1986
El Gobierno, la CEOE y UGT han trazado en secreto durante las dos últimas semanas las líneas generales del acuerdo económico y social para 1985-1986. Comisiones Obreras, al margen de estas reuniones, ha seguido las conversaciones en la mesa de negociación ajena a las aproximaciones logradas por el resto de los interlocutores. La iniciativa del acuerdo partió del presidente del Gobierno, Felipe González, y del titular de la CEOE, José María Cuevas. En la negociación se han discutido temas no abordados oficialmente, como el salarial, en el que se perfila para 1985 una banda cuya parte alta podrá superar el 7%.
La reunión secreta en la que por primera vez quedó perfilado el posible contenido de un acuerdo sin CC OO tuvo ya un marcado carácter técnico. Se celebró el martes 28 de agosto, al día siguiente del inicio de la segunda fase de las negociaciones.El encuentro tuvo como marco una cena de trabajo a la que asistieron, por parte del Gobierno, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Joaquín Almunia; por la patronal, Juan Jiménez Aguilar y Fabián Márquez, y por UGT, José Luis Corcuera y José María Zufiaur. Durante la cena quedaron perfiladas las líneas generales del pacto, posteriormente desarrolladas en otros encuentros también secretos.Una fuente próxima al ministro de Trabajo confirmó ayer la celebración de la reunión, en la fecha, citada, así como los asistentes, con excepción de José María Zufiaur. Asimismo manifestó que se había llegado a un consenso sobre los principales temas del acuerdo, salvo en lo referente a la reducción de los tipos de interés. También señaló que esta misma semana representantes del ministerio habían mantenido un contacto con Comisiones Obreras.
José Luis Corcuera y José María Zufiaur negaron rotundamente la existencia de dicha cena de trabajo y afirmaron que no habían mantenido ninguna reunión conjunta con el Gobierno y la patronal al margen de la mesa de negociaciones. "Lo cual no quiere decir", señaló Zufiaur, "que no haya habido o vaya a haber contactos bilaterales".
Fabián Márquez, asesor en asuntos laborales de la patronal, optó anoche por "ni confirmar ni desmentir" la citada cena de trabajo, aunque reconoció la celebración de conversaciones al margen de la negociación formal, en las "que se han conseguido avances sobre las líneas generales del acuerdo". Juan Jiménez Aguilar, de CEOE, también citado como asistente, no pudo ser localizado ayer por este periódico, al igual que José María Cuevas.
El secretario de acción sindical de CC OO, Agustín Moreno, declaró que desconocía absolutamente estas reuniones, y manifestó que la postura de su sindicato era que la verdadera negociación no puede hurtarse a la mesa formalmente constituida. Confirmó, no obstante, que representantes de su sindicato habían sido invitados hace unos días a reunirse con responsables de Trabajo, sin que "se entrara a negociar ningún contenido del acuerdo".
Marcelino Camacho declaró que le "costaba creer que se hubiera alcanzado un acuerdo, ya que sería demasiada felonía". "Un acuerdo sin CC OO", dijo, "sería papel mojado, y un acuerdo de este tipo sería el suicidio de UGT".
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