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El nuevo consejo sindical británico ofrece todo su apoyo a los mineros en huelga desde hace seis meses

El nuevo Consejo General de la Confederación de Sindicatos británicos, elegido en el congreso anual que finalizó ayer en la ciudad de Brighton, al sur de Inglaterra, ofreció todo su apoyo a los mineros que se encuentran en huelga desde hace seis meses.Norman Willis, nuevo secretario general de la Confederación de Sindicatos, señaló que el apoyo del organismo que preside se realizará de varias formas, aunque queda por resolver todavía si respaldará una petición de los mineros para paralizar los movimientos del carbón y del petróleo a través de los piquetes de huelguistas.

Willis dijo también que se va a acentuar el esfuerzo por hallar medios que ayuden a financiar y aliviar los problemas económicos por los que atraviesan las familias de los mineros.

La huelga se inició el pasado 9 de marzo, tres días después de que la empresa nacional del carbón, NCB, anunciara su decisión de reducir la producción anual en cuatro millones de toneladas.

Del mismo modo, la empresa anunció entonces el cierre de numerosos pozos de extracción carbonífera cuya rentabilidad consideraba nula. Este cierre, así como la reducción del tonelaje de carbón a extraer, implicará, según cálculos contrastados, la pérdida de un número de puestos de trabajo cifrado entre 20.000 y 25.000.

Los representantes de la empresa nacional del carbón y del sindicato minero volverán a reunirse el próximo domingo en un nuevo intento por encontrar una salida a la larga huelga a través de las negociaciones.

Un portavoz del sindicato minero, la Unión Nacional de Mineros, dijo que se entablarán conversaciones secretas el domingo próximo. Se cree que de estas conversaciones puede surgir un principio de acuerdo que ponga fin al largo conflicto, pero ninguna de las dos partes enfrentadas quiso avanzar detalles sobre las negociaciones.

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Este silencio pone fin a tres días de confrontaciones sin precedentes, durante los cuales el líder minero Arthur Scargill y el presidente de la empresa nacional del carbón, Ian Macgregor, intercambiaron insultos ante la televisión.

Los piquetes de mineros en huelga prosiguieron durante las últimas jornadas sus acciones violentas, orientadas a impedir el retorno al trabajo de los esquiroles. En estas acciones la policía detuvo a 39 mineros miembros de los piquetes, que lanzaban piedras y otros objetos contundentes contra otros mineros que pretendían, sin éxito, regresar al trabajo. Un centenar de obreros del puerto de Bristol, ligados hasta ahora a la huelga en solidaridad con sus compañeros mineros, decidió, no obstante, desafiar a los piquetes y regresar al trabajo.

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