Un niño de siete años, gravemente herido por un disparo realizado en una violenta persecución

A. M. Adolfo Gómez Benito, un niño de siete años de edad, resultó gravemente herido el pasado viernes a las 20.20 horas al ser alcanzado en el cuello por un disparo en el transcurso de un tiroteo entre los ocupantes de un vehículo policial y tres presuntos atracadores en el barrio de Moratalaz, de Madrid. Adolfo Gómez Horcajada, padre del niño, afirma que no sabe quién disparó la bala que hirió a su hijo "pero quiero que lo que ha ocurrido se sepa para que no vuelva a suceder".

La Jefatura Superior de Policía de Madrid facilitó ayer una nota oficial que señala que Adolfo Gómez resultó herido "accidentalmente", pero que no esclarece las circunstancias concretas del disparo. También señala que uno de los dos delincuentes detenidos resultó herido de bala, así como un policía nacional al cortarse en un pie.Según esta versión, un coche policial descubrió en la Plaza de Conde, de Casal un coche en el que, poco antes, habían escapado tres atracadores armados de una escopeta de cañones recortados, después de cometer un robo con intimidación en una tienda de electrodomésticos en la calle de Lago de Sanabria, número 2. El vehículo, un Ford Escort matrícula M-3954-FZ, correspondía al robado a su propietario por tres jóvenes a punta de navaja, a primeras horas de la tarde.

Al poco de iniciada la persecución por la carretera de Valencia, los presuntos delincuentes dispararon sobre el coche policial. La persecución se prolongó por varias calles del barrio de Moratalaz. En la plaza del Corregidor Maceda de Taboada, el coche perseguido derrapó y dos ocupantes emprendieron una carreta a pie, perseguidos igualmente por policías nacionales. El conductor del Ford consiguió poner el coche en marcha y seguir su huída en él. Los otros dos huídos se apoderaron de otro coche, un Seat 127 matrícula M-5589-DG. Nuevas dotaciones policiales fueron informadas de este dato.

En el cruce de las calles Encomienda de Palacios con Arroyo Fontarrón, los delincuentes volvieron a abandonar su vehículo y correr a pie. La policía detuvo a uno de ellos, L. C. V., de 25 años de edad, con antecedentes policiales. Poco después era detenido también el conductor del Ford, L. R. B., de 26 años de edad, también con antecedentes policiales. En el coche se intervino la escopeta, armas blancas y electrodomésticos.

Según el padre del niño herido, su esposa, María Benito, se encontraba en las proximidades de estas calles, en la esquina con Arroyo Belincoso, llamando por teléfono desde una cabina pública. María Benito iba acompañada de sus dos hijos, de su cuñado y de los. dos hijos de éste. Los cuatro niños esperaban jugando, a pocos metros de la cabina. En ese momento escucharon los disparos y un instante después el niño Adolfo Gómez cayó al suelo a causa de un disparo que le atravesó el cuello.

Su hermano y sus dos primos pensaron que se había arrojado al suelo asustado por los ruidos, hasta que vieron la sangre. Un policía municipal de paisano tapó la herida con un pañuelo y, se llevó al niño en un coche particular al Hospital Provincial.

El niño fue intervenido quirúrgícamente durante casi tres horas y pasó a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la sección infantil del Hospital Provincial.