Ingresa en prisión el dueño del 'pub' Don Yo, que mató con un rifle a dos hombres

Antón Luis Santiago Montoya, propietario del pub Don Yo, situado en el número 49 de la calle de Antonio López, que el pasado sábado de madrugada mató con un rifle a dos presuntos ladrones que iban desarmados, ha ingresado en la prisión de Carabanchel, según informaron ayer fuentes judiciales. Por otra parte, los dos fallecidos -José María Espino, de 30 años, y otra persona aún no identificada- fueron enterrados ayer. Según Santiago, Espino y su acompañante, en unión de un tercer individuo armado, intentaron atracar su establecimiento. El supuesto tercer atracador huyó ileso y sin usar su arma.Aproximadamente unas 30 personas, entre las que se encontraban sus familiares más próximos, acudieron al sepelio de José María Espino, cuyo cuerpo fue enterrado en el cementerio de la Almudena. Los familiares de Espino aseguraron ayer que se habían enterado de la muerte del joven el domingo por la mañana al leer la noticia sobre el suceso en los periódicos.

La familia se preguntaba ayer "cómo es posible que la policía no nos haya avisado, si el cadáver se identificó desde el primer momento". El otro hombre muerto en las mismas circunstancias, y del que sólo se sabe que tenía unos 30 años, fue enterrado también ayer sin que haya sido identificado, según informaron fuentes policiales.

El propietario del pub, que fue puesto a disposición judicial por la policía bajo la acusación de tenencia ilícita de armas, ejercitó su derecho a no declarar en comisaría, según informó ayer la Jefatura Superior de Madrid. Fuentes del juzgado precisaron que Santiago se encontraba detenido en prisión incondicional en Carabanchel. En el auto abierto por el juez se le imputan "hechos muy graves" y se afirma que dos personas han muerto como consecuencia de los disparos que Santiago efectuó, aunque el juez competente aún no ha calificado el posible delito.

El detenido, que se negó a declarar en comisaría, avisó sin embargo a la policía en la madrugada del sábado desde el pub que regenta, en el número 49 de la calle de Antonio López, y aseguró que había sido víctima de un atraco y que había dado muerte a dos de lo asaltantes con un rifle Winchester 109, para el que no dispone de licencia y que había adquirido a un desconocido.