La violencia en el fútbol
Todos los hispanófilos e hispanohablantes aquí se han alegrado mucho del buen resultado del equipo nacional español en el Campeonato Europeo de Fútbol en Francia. Sin embargo, nos duele la exagerada agresividad y las a veces violentas entradas de algunos jugadores. Y, ¿por qué? El equipo tiene capacidad y talento para ser uno de los mejores del mundo sin necesidad de actuar a la italiana. ¿Por qué no como los ingleses, que producen un fútbol directo y durísimo, pero limpio y sin protestas contra el árbitro?El actual conjunto español puede hacerlo mejor: con un juego mucho más atractivo, rápido y refinado.
Acertaba, por cierto, el anciano economista e historiador sevillano don Ramón Carande (EL PAIS, 11 de diciembre de 1983), que sostenía: "Este país, que engloba lo muy bueno y lo muy malo ... sólo se arreglará con educación ... Necesitamos civismo, saber comportarnos con los demás. Pero es difícil".
Lástima: con un poco más de disciplina (y, por ejemplo, Gordillo y Máceda en la final) el nuevo campeón europeo sería ahora España.
¡Con los mejores votos para los mundiales de 1986 y de todo corazón!-
