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Crítica:España, digna subcampeona de la Eurocopa de fútbol
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Orgullo, improvisacion y suerte, bases del éxito español

Se cumplía el minuto 27 del último y decisivo partido clasificatorio del Grupo 11 de la Eurocopa de Naciones. España y la República Federal de Alemania, en aquellos momentos todavía campeona, luchaban por ocupar una de las dos plazas que daban derecho a las semifinales. En un Parque de los Príncipes, que no llegó a llenarse del todo, pero que ofrecía un magnífico aspecto, los alemanes parecían dejar la iniciativa a los españoles, mientras ellos creaban las mejores oportunidades de gol. El lateral izquierdo, ahora traspasado al Verona de Italia, Hans-Peter Briegel, se había incorporado al ataque, para rematar dos lanzamientos de esquina y había estrellado sus cabezazos en la madera. Toda España, incluidos los jugadores de la selección, temían que aquel gigantón acabara con sus ilusiones en breves minutos. La defensa no entendía nada. Luis Arconada, menos. Nadie les había explicado que Briegel subía a rematar en cuanto podía.

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Total, que cuando Klaus Allofs se disponía a lanzar el tercer córner, Ricardo Gallego y Arconada hicieron un aparte junto al poste izquierdo. "Luis" le dijo el Soso al guardameta vasco, "o hacemos algo o este tío nos destroza". "Tranquilo, Ricardo, que yo me ocupo de él", le respondió Arconada. Dos salidas de puños contundentes y una mayor vigilanc¡a al gigante abortaron sus siguientes intentos.Se trata de una simple anécdota, de uno de los miles de lances que se dan a lo largo de una competición, pero lo cierto es que ese ánimo de victoria, de solucionar los problemas sobre el mismo terreno de juego, esa puntilla (le decir "a estos tíos, podemos ganarles", esas ganas de demostrar que muchos se habían equivocado al juzgarles frívolamente, es lo que convirtió a la selección española de fútbol en la verdadera sorpresa de la Eurocopa. Francia ya había triunfado en el último Mundial. España, en esa misma Copa del Mundo se había estrellado, hundido en la miseria.

Todo empezó con el empate frente a Rumanía. Después de aquel resultado, los jugadores, tal y como ha comentado más de uno a este enviado especial, recibieron todo tipo de críticas. Críticas que no sólo partieron de los medios informativos. "Sabernos", dice uno de ellos, el mismo que se gasta miles de pesetas hablando cada día con su esposa para que le lea casi todo lo que se publica diariamente en España, "que las crónicas de aquel encuentro nos acusaban de conservadores, derrotistas, de no querer ganar y tener suficiente con el empate. Pero esas críticas las aceptamos, entre ótras razones porque no jugamos bien".

Lo que les molestó a los jugado res fueron los comentarios de pasillos de determinados miembros de la expedición española, entre los que se encontraba algún técnico y por supuesto, algún directivo Esos comentarios, en los que se les acusaba, fundamentalmente, de falta de profesionalidad, de ser unos señoritos y de parecer de mantequilla, convirtieron al seleccionado en un clan, en un grupo de amigos que, por encima de todo, querían desmentir, destrozar, hacer tragar todas esas frases a sus detractores.

Jugar lejos de casa

En ese sentido, algún jugador ha llegado a decir que "el desconocimiento que Álvarez del Villar tiene de las interioridades del fútbol ha podido condicionar sus palabras, pese a que todis creemos que su preparación, su programación, ha sido buena y no ha tenido nada que ver con la del Mundial-82, que casi no existió". Uno de los titulares manifestó a EL PAÍS que "el aspecto fisico ha sido muy importante en esta competición, pero hay que tener en cuenta que, cuando acabas la temporada, te encuentras fisicarnente muy bien, y lo único que tienes cansado es la cabeza".

Los jugadores se quejaron, en determinados entrenamientos realizados en Soto Grande, de los ejercicios encargados por el profesor, "y yo estoy convencido", comentó el mismo titular, "que Carlos no hizo todo lo que tenía programado, por temor a las protestas". Varios jugadores presentes en el Mundial-82 coincidieron en señalar que "Álvarez del Villar supo programar los ejercicios entremezclándolos con entretenimientos diversos, del tipo del frontón-tenis, baloncesto y alguna que otra pachanga, cosas que nos gustan mucho y te obligan, sin darte cuenta, a hacer ejercicios".

El aspecto táctico

En el aspecto táctico, existen diversas opiniones. Todos coinciden en señalar que Miguel Muñoz ha desarrollado una brillante preparación en el tema de encontrar los jugadores idóneos para desarrollar un sistema de juego. También, y con diferencia al Mundial, elogian la posibilidad que ha habido, considerada por muchos como "fundamental", a la hora de "improvisar una táctica, modificar un sistema, durante el partido, porque Muñoz permite que los hombres con capacidad, con mando en el campo, puedan variar algunas cosas". "Eso", según otro de los presentes en el Mundial, "era materialmente imposible con José Emilio Santamaría, porque te marcaba un carril y no podías moverte de él. Lo hacía con la mejor voluntad del mundo, pero tú no te atrevías a modificar ni uno solo de tus movimientos".

Algunos jugadores acusan a Miguel Muñoz de pensar en exceso; en el pasado, de estar estancado en los tiempos de Paco Gento o considerar, como así lo ha manifestado durante esta Eurocopa, que "Platini se asemeja a Di Stéfano, o Señor y Julio Alberto se reincorporan al ataque como lo hacían Collar y Lapetra". Este mismo estancamiento, que se refleja en la confianza ciega que Muñoz tiene en la impronta española, la inspiración, es lo que ha hecho que los jugadores perdieran, en determinados momentos, la fe en su entrenador. Por ejemplo, cuando Portugal marcó en el minuto 52 del partido frente a España y el seleccionador no incorporó a Manolo Sarabia al equipo hasta el minuto 70. "Gallego", comenta uno de los seleccionados, "tuvo que situarse, por motu propio, de delantero centro, para intentar conseguir que la defensa de ellos no se moviera de esa zona".

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