El robo de la 'ikurriña'
El hecho de recuperar (no robar) una ikurriña vasca exhibida con tal mala fortuna para la bandera y lo que ella representa para los vascos, me parece un hecho de justicia que lamento no se hubiera hecho antes.A mi modo de ver, es una falta a la convivencia nacional exhibir las distintas banderas de las comunidades como botín de guerra obtenido por el ejército ganador.
Un pueblo como el vasco, tan amante de sus símbolos, me parece lógico que considere que ese destino no es el más idóneo para su bandera.
Desconozco si otras banderas de las distintas comunidades siguen en tal paradero. A mí personalmente me molestaría que la bandera valenciana fuera considerada todavía como un objetivo arrebatado al enemigo.
Conviene que los organismos oficiales vayan por delante de estas cosas para evitar que el señor Elósegui u otros Elóseguis hagan actos que sean calificados por algunos como robo, con la consiguiente tensión que esto acarrea.
Pongamos, por ejemplo, que la guerra de la Independencia se hubiera perdido contra los franceses; luego, al paso de los años, nuestra bandera fuera exhibida como trofeo de guerra: creo que sería un deber de todos los españoles recuperar nuestra bandera y colocarla en otro mástil más digno.-