La CEOE participara en la concertación social con la oferta de crear empleo juvenil a cambio de moderación en los salarios
La concertación social para los próximos dos años puede lograrse mediante acuerdos que condicionen la moderación salarial a ciertos compromisos en creación de empleo para jóvenes en busca de su primer trabajo, siempre y cuando ello no lleve a nuevos aumentos del gasto público, que no haría sino complicar aún más la grave situación de déficit del sector público, señaló José María Cuevas en su discurso ante la asamblea general de la CEOE, que le eligió ayer como nuevo presidente de la organización cúpula empresarial. El presidente de la patronal anunció que se iba a potenciar "el mayor clamor social" posible para lograr acabar con el despilfarro del gasto público que permita una mejor recuperación de la economía española.
La asamblea general de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), en la que se eligieron los nuevos órganos de dirección de la patronal, decidió nombrar por aclamación a Carlos Ferrer Salat presidente fundador de la organización, tras la propuesta de Cuevas, que rindió un cálido homenaje a su antecesor en el cargo y en la labor de creación y potenciación de la organización patronal.José María Cuevas, en su intervención ante la asamblea, aceptó que había signos inequívocos de recuperación de la economía, como la mejora de las exportaciones o el descenso de la tasa de inflación, pero que al tiempo siguen subsistiendo graves problemas que ponen en entredicho toda posibilidad de recuperación. Para el presidente de la patronal la actuación de la Administración en los últimos 15 meses está paralizando la capacidad de los empresarios para asumir los riesgos que comporta la actividad empresarial, ya que se está viviendo un creciente intervencionismo.
El problema básico de la economía española sigue siendo, para Cuevas, el tremendo crecimiento del gasto público, que tienen como consecuencia inmediata un aumento del déficit del sector público, ya que los mayores gastos no se contrarrestan con el equivalente de los ingresos, a pesar de que la presión fiscal crece sin cesar. José María Cuevas anunció que la CEOE continuaría con su política de crear un "clamor social" que se levante contra el irrefrenable gasto público hasta lograr que se paralice la tendencia.
Optimismo para un nuevo acuerdo
Las posibilidades de lograr un acuerdo social de dos años de duración, como plantea en la actualidad el Gobierno, es vista con optimismo por la patronal siempre y cuando se varíen las coordenadas que hicieron posibles los pactos de años anteriores. Para la patronal, el problema del no funcionamiento del Acuerdo Nacional sobre Empleo a nivel global se debió a que el Estado se comprometió con las organizaciones sindicales a muy fuertes contrapartidas en materia de pensiones y Seguridad Social que elevaron los gastos públicos, con lo que se ganaba por una parte se perdía por el mayor_ protagonismo del Estado.
Para los dos próximos años, según Cuevas, la moderación salarial que. deben aceptar los sindicatos no debe tener contrapartidas en materia de un mayor gasto público, en línea con las ideas del ministro de Economía y Hacienda, aunque sí es posible llegar a compromisos en materia de empleo, sobre todo para que los jóvenes accedan a su primer empleo aunque sea con carácter temporal, como se viene propiciando desde la Moncloa.
José María Cuevas señaló como principales problemas para los empresarios en la actualidad la competencia que el Estado les hace a la hora de intentar captar los recursos financieros existentes en el mercado; la elevada presión fiscal que soporta la sociedad y que es muy superior a la creación de riqueza; el intervencionismo creciente, y unas relaciones laborales inadecuadas que no responden a la situación actual, y que se concretan en el mantenimiento de proteccionismos y de la rigidez laboral.
José María Cuevas pidió que la Administración reconozca, como se ha hecho en otros países, la diferencia existente entre las pequeñas y medianas empresas y las grandes y que se dote a aquéllas de mecanismos de actuación diferentes dada su mayor posibilidad de adaptarse más rápidamente a las cambiantes condiciones de la economía.
Los empresarios, en opinión de su nuevo presidente, se encuentran inseguros porque la Administración no tiene en la actualidad una política a medio plazo concertada, ya que el Gobierno ha sido incapaz de obtener el respaldo social suficiente. Para ello considera necesario un acuerdo a dos años que trate no sólo de aspectos salariales, sino que vaya más lejos y se refiera a temas como el déficit del sector público, la Política monetaria del Gobierno y el apoyo a la inversión privada.
El resto de problemas que preocupa a la clase empresarial se refieren al camino que está recorriendo el proceso autonómico, que puede llevar a una duplicidad de las ineficacias actuales en lugar de acercar el modelo de administración al que requiere la sociedad, y las negociaciones para la incorporación de España a la Comunidad Económica Europea, que podría provocar graves perjuicios si en el transcurso de las mismas prevalecieran intereses políticos de urgencia electoral por encima de los estrictamente económicos.
