Sangre fría para una crisis

( ... ) Si la actual escalada de ataques aéreos sobre los petroleros es el preludio de la esperada ofensiva veraniega de Irán, esta guerra tan frecuentemente olvidada podría tomar otro. rumbo triste y sangriento.Las consecuencias que para la región puede tener la escalada de la guerra Irán-Irak parecen enormes, como lo demuestra la rápida remisión del asunto al Consejo de Seguridad por parte de los Estados del Golfo y la inquietud norteamericana. Un anticipo de las consecuencias que tendría para el mundo no comunista la posible pérdida de una quinta parte de sus suministros saltó ayer en los mercados financieros. De todos modos, no queda claro que el resultado de un empeoramiento de la situación sea apocalíptico para la economía mundial. Las reservas públicas y privadas siguen siendo elevadas, aunque los accionistas privados pueden ejercer una influencia desestabilizadora si compran petróleo cuando el precio va a subir (las acciones son más productivas) y lo venden cuando en teoría deberían comprar. Se ha afirmado que la utilización de las reservas estratégicas puede resultar contraproducente si alimenta temores de una subida de precios, aunque por otra parte es probable que los países occidentales traten de reaccionar con rapidez y vendan reservas si los precios se les escapan de las manos.

, 18 de mayo