Los editores temen nuevas trabas fiscales a la exportación de libros

La noticia, aparecida recientemente en la Prensa, de que se están efectuando presiones para que no se reduzca este año la desgravación fiscal a la exportación, ha causado importante revuelo en el sector editorial, que se vería penosamente afectado en el caso de que esas medidas llegaran a convertirse en realidad. Francisco Pérez González, presidente de la Federación de Gremios de Editores de España, habló ayer sobre el tema en nombre del sector.

"A nosotros esto nos preocupa en especial, porque esos rumores no son coherentes con los propósitos y deseos del Gobierno de apoyar al sector editorial, y muy concretamente en lo que se refiere a la exportación del libro. Para nosotros sería totalmente incomprensible que se tomara esa medida. Además, no nos parece que la reducción de la desgravación fiscal a la exportación sea Id que haya que hacer para reducir el déficit del gasto público; eso sería tomar medidas contra sectores que en estos momentos están haciendo un esfuerzo gigantesco para aminorar la situación general de crisis. En el caso editorial, saliendo de unas circunstancias relacionadas con países muy difíciles".Añade que confían en que el Gobierno no llevará este tema adelante, "porque nosotros, en un documento que estamos finalizando de redactar, para el relanzamiento del sector editorial, que esperamos entregar en fechas inmediatas a las autoridades de los ministerios de Economía y Hacienda, en este documentos, digo, recogemos y resumimos las aspiraciones principales del sector en unos términos muy prágmaticos. Este documento no es sino consecuencia de las diversas conversaciones que hemos sostenido tanto con la Secretaría de Estado de Comercio como con el Ministerio de Cultura".

Aplicación inmediata

Dice que, para los editores, las cuestiones claves están en este documento, "y tenemos la esperanza de que sean medidas de aplicación inmediata, fundamentalmente porque son posibles. De entre ellas habría que destacar, por un lado, la posibilidad de que el sector editorial tenga una normativa para el crédito de prefinanciación que le permita utilizarlo. Todos los sectores lo tienen y utilizan, pero las características especiales del sector editorial exigen una mecánica distinta, y esperamos que esto se resuelva"."Por otro lado", prosigue Pérez González, "el sector necesita encontrar unos mecanismos más ágiles para poder utilizar el seguro de crédito a la exportación, y que contemple la forma específica de exportacion del libro español. Creemos que ahí puede haber un acuerdo marco entre la Compañía Española de Crédito a la Exportación y la Federación de Cámaras del Libro".

"Por otro lado, nosotros estamos planteando una serie de medidas para la aplicación de las nuevas tecnologías al sector editorial, tanto en los aspectos creativos como en los funcionales y de servicios, así como en todo lo que afecta a la distribución y a la nueva imagen que estimamos debe tener el sector, con una aplicación de los medios informativos a través de la electrónica, que permita una utilización más racional de las librerías. En ese documento se piden una serie de apoyos que están en línea con lo que es el marco general que está fijando el Ministerio de Industria. Por tanto, creemos que en una reunión próxima con las personas que designe dicho ministerio pueden encontrarse las vías adecuadas".

Los editores también creen que es necesario que el sector gráfico no pierda la delantera que llevaba en cuanto a los elementos gráficos que han permitido que España sea uno de los exportadores principales, no sólo de los libros editados en nuestro país, sino de los libros creados en otros países e impresos en España.

"También planteamos que se realice una política seria y responsable de bibliotecas, tanto en la labor que afecta al Ministerio de Cultura como a las distintas autonomías".