Seguro triunfo de Marcos en Filipinas tras una campaña electoral con más de 200 muertos
El Movimiento de la Nueva Sociedad (KBL), de¡ actual presidente, Ferdinand Marcos, de 67 años, se apuntará hoy, según todos los indicios, una holgada victoria en las elecciones legislativas de Filipinas, tras una campaña caracterizada por la violencia (entre 200 y 400 muertos, según las distintas fuentes), el impresionante despliegue propagandístico del partido oficialista y el boicoteo de algunos grupos de oposición.
Cifras oficiales admiten que los incidentes directamente relacionados con la campaña han causado 200 muertos, pero fuentes diplomáticas de Manila hacen que esta cifra ascienda a los 400. Y ello sin contabilizar las víctimas de los enfrentamientos entre el Ejército y los guerrilleros comunistas y moros que operan en el sur del archipiélago, constituido por 7.000 islas, informa desde Manila el enviado especial de EL PAIS .Las calles de Manila registraron ayer manifestaciones pacíficas de miles de personas en favor del boicoteo a las elecciones, primeras que se celebran desde el levantamiento de la ley marcial en 1981, pero muy lejos, según la oposición, de reunir las mínimas garantías democráticas.
El ex senador José Diokno, uno de los líderes del movimiento en favor del boicoteo, declaró que éste es el primer paso hacia la desobediencia civil, que definió como "un método pacífico de ejercer la soberanía popular" cuando no se puede conseguir por otros medios.
Diokno considera inútil elegir un Parlamento cuando la Constitución permite a Marcos ignorar a la Asamblea a la hora de dictar sus leyes.
El KLB, que gobierna en Filipinas desde hace 18 años, ha copado prácticamente los espacios publicitarios en radio, prensa y televisión. Se han multiplicado las apariciones de Marcos, de su esposa, Imelda, y de sus hijos Imee y Ferdinand.
Los medios de comunicación del país han abrumado a los filipinos con el número de pantanos inaugurados, los kilómetros de carreteras construidos y la paz y el orden conseguidos bajo el mandato de Marcos.
En su última intervención televisada, el presidente filipino prodigó las cifras sobre las realizaciones de su régimen, se mostró seguro de su victoria absoluta frente a la oposición y calificó de "especulaciones infundadas" los rumores sobre su enfermedad.
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