La Agencia Internacional de la Energía valora el cambio en la política energética española
España ha llegado en su política energética a "un cambio de gran importancia", según el informe anual de la Agencia Internacional de Energía (AIE), informa Comtelsa. Este cambio parte del Plan Energético Nacional de 1983 y tendrá como resultado "la reducción de las importaciones de petróleo, gas y carbón", así como el impulso de la producción interior de estos productos para atender al consumo.
En su informe, un capítulo de Las políticas y programas de la AIE, de próxima aparición, la agencia constata que el Gobierno español tiene un papel conductor en el sector energético "que no parece probable que vaya a disminuir". Define también el giro energético español como un corte sustancial en las necesidades de energía eléctrica y de energía nuclear para dar paso "a una mayor confianza en el carbón doméstico de la que se tuvo con anterioridad". Pese a recordar que España no es país rico en recursos energéticos, para la AIE hay en el país carbón, petróleo, gas y uranio en cantidades suficientes "para aconsejar que se acelere el esfuerzo en su desarrollo".La AEI efectúa varias recomendaciones de carácter general, como la reducción de la dependencia en la importación de energía y el fortalecimiento de una política de precios basada en los costes; el establecimiento de objetivos para que arte de la flota automovilística española vaya pasando a usar fuel, y la rápida aprobación del PEN en el Parlamento, "con la puesta en práctica de una política energética estable y coherente a la que poder referirse", además de proseguir con la exploración de posibles yacimientos de gas y petróleo.
