Los GAL asesinan en Francia a un miembro de ETAm y hieren gravemente a otro

El miembro de ETA Militar Rafael Goikoetxea Errazkin, responsable, al parecer, de los pasos fronterizos de Guipúzcoa, y un pequeño industrial, Angel Rodríguez Sánchez, murieron ayer tarde en atentados de signo aparentemente distinto. El primero fue perpetrado en la localidad vasco-francesa de Saint-Martin-d'Arossa. En este atentado, del que se han responsabilizado los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL), resultó gravemente herido el activista de ETAm Jesús Zugarramurdi Huici, Kiskar, implicado, según la policía, en el atentado contra Carrero Blanco. El posible intento de secuestro de un directivo de Conservas Orlando completa la crónica negra de la jornada.

El cadáver de Ángel Rodríguez Sánchez -de 42 años de edad, padre de tres hijos, propietario de un taller de electromecánica y de una empresa de servicio de coches grúa- fue localizado, minutos después de las cuatro de la tarde, con dos tiros en la cabeza, en una pista cercana a la carretera que conduce a Oyarzun. Ayer, la esposa de la víctima afirmó desconocer si Ángel Rodríguez había sido amenazado por las organizaciones terroristas, pero la policía atribuye el atentado a ETA Militar, por la munición empleada y por la forma en que fue cometido el asesinato.Una persona telefoneó por la mañana a gel Rodríguez requiriendo los servicios de Grúas San Miguel en la zona en la que fue encontrado el cadáver, un camino de tierra próximo a la fábrica TECSA. En contra de su comportamiento habitual, el pequeño industrial no telefoneó por la mañana a su domicilio ni regresó a la hora de comer, lo que provocó la inquietud de su esposa.

Una mujer que puede formar parte del comando terrorista llamó por teléfono al domicilio de la víctima, indicando que el coche grúa que utilizaba Angel Rodríguez se encontraba estacionado -con las puertas abiertas y la radio encendida- en las proximidades de Ventas de Irún.

Alarmada por esta información, la esposa del industrial alerta a la Policía Municipal de Irún a las 15.30 horas, y media hora después, una patrulla de ese cuerpo localizó el cadáver de su marido, que presentaba dos orificios de bala: uno, de entrada, en la sien izquierda, con salida por la sien derecha, y otro a la altura del cuello, con la bala alojada en su interior. La policía, que ha encontrado en el lugar dos casquillos marca Geco, cree que el industrial permaneció secuestrado por los miembros del comando.

Ángel Rodríguez, natural de Villafranca de Barros (Badajoz), residía en Irún desde hace 13 años y deja tres hijos, de 15, 13 y 8 años de edad.

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