Dos estilos del éxito

El estilo de fútbol está en función de los jugadores que tienes. La Real Sociedad ha tenido que variar su juego al causar baja hombres como Satrústegui, Alonso, Kortabarría, Olaizola, Idígoras o, hasta hace poco, Zamora, aunque se intenta mantener el estilo que le dio dos ligas. El Athlétic de Bilbao está consiguiendo también éxitos con otro tipo de fútbol, implantado por Clemente. Los dos hemos tenido éxitos con una concepción diferente del juego.El juego del Athlétic se basa en lanzamientos largos sobre los delanteros. Si tiene el balón Goikoetxea, centra en diagonal sobre el lado derecho de su ataque; si el balón está en poder de Liceranzu, que genrralmente juega por la derecha, lanza sobre la izquierda. Los laterales aprovechan los pasillos que dejan Dani y Argote, y centran, casi sobre la marcha, al segundo poste. Los saques de esquina también son importantes en el esquema del Athlétic, ya que Clemente aprovecha la fuerza de Liceranzu y Goikoetxea. Argote es un especialista y lanza con rosca hacia dentro o hacia fuera, sobre el primero o sobre el segundo poste. Uno de los dos defensas que sube al ataque se coloca a la contra, generalmente Liceranzu, y arriba, Goikoetxea.

A la hora de defender, el Athlétic defiende en línea, lo que provoca muchos fueras de juego. Esto exige una presión en el centro del campo. El marcaje de los centrales es en cuña, en función de donde cae el delantero centro. Si cae a la derecha le coge Goiko; en el otro caso es Liceranzu el encargado. Defender en línea es muy arriesgado; el delantero, si desborda a su marcador desborda a cuatro; por eso la labor de los centrocampistas es importante. También la de los delanteros, que en cuanto pierden la pelota persiguen al contrario.

El juego de la Real es de una mayor elaboración en el centro del campo, hasta encontrar los espacios. La defensa no juega generalmente en línea. Los laterales no suben. Son los centrocampistas los que entran por las bandas, mientras que antes Alonso era el hombre capaz de romper a cualquiera por el centro. Los éxitos de la Real se basaron en la retención del balón el mayor tiempo posible, amparada en la mayor técnica que teníamos. Ahora al perder técnica se pierde antes la pelota o tardamos más en encontrar los espacios. En la delantera hemos perdido altura, y entonces hemos tenido que reducir el juego aéreo. Se trata de buscar otras fórmulas, las más parecidas al esquema general y adaptables al cambio de hombres.