París desea que disminuya la tensión en las relaciones hispano-francesas
A pesar de la protesta del Gobierno francés ante el español por los camiones incendiados ayer en el País Vasco y en Cataluña, y de la intervención personal del embajador de París en Madrid, Pierre Guidoni, las autoridades de este país consideran su actitud "no agresiva", y desearían que se calmara el clima provocado por la "batalla naval" hispanofrancesa de la semana pasada. Mañana, por otra parte, en Lorient, se inicia el proceso a los patronos de los dos barcos españoles.Ayer, el Gobierno de Mitterrand, al conocer la des trucción de siete camiones matriculados en Francia, la mayoría cargados de pescado, condenó el acto, pero prescindiendo de formas que "pudiesen agravar la deteriorada situación de las relaciones actuales entre los dos países", comentó en París un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores. El mismo portavoz añadió que, a pesar de lo anterior, los camioneros franceses se han manifestado activos para.pedir toda clase de respaldo por parte de las autoridades de su país; y, en primer lugar, "esperan que el Gobierno español proceda como el francés cuando un camión extranjero es atacado en Francia: que se indemnice justa e inmediatamente a la víctima".
Es cierto que las autoridades francesas, siempre que los camiones españoles han sido destruidos en el sur francés, se han mostrado prestas y rápidas para indemnizar a los camioneros. La opinión pública, como los medios oficiales, se interroga sobre el futuro de la situación que ha creado el grave incidente del golfo de Vizcaya; hasta la fecha no se ha ofrecido ninguna explicación convincente de por qué consideraron necesario el empleo de las armas con el fin de apresar a los barcos españoles.
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