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El Gobierno de Bélgica tomará medidas para evitar que ETA traslade su base aquel país

El primer ministro belga, Wilfried Martens, reconoció ayer que existe el "peligro" de que los activistas de ETA se desplacen a Bélgica para evitar las medidas de control que Francia comienza a aplicarles. Martens agregó que los órganos de seguridad de su país están siguiendo el tema de cerca y están proponiendo a su Gobierno medidas adecuadas, para luchar contra este problema. Por su parte, el presidente del Gobierno español, Felipe González, mantuvo su "ambigüedad calculada" ante el tema de la permanencia de España en la OTAN.

En la conferencia de prensa que el primer ministro belga ofreció ayer junto a Felipe González -que ayer noche regresó a Madrid, después de dos días de visita oficial a Bélgica-, Martens afirmó, además, que no es tarea de su Gobierno "insistir para que España vaya más lejos en su integración en la OTAN", dado que "éste es un asunto soberano del Gobierno español". Bruselas ha manifestado en repetidas ocasiones su satisfacción por la permanencia de España en la OTAN. Por su parte, González aseguró que nunca recibió presiones de ningún país en este sentido.Refiriéndose al proceso de adhesión española a la Comunidad Económica Europea -que Bélgica viene defendiendo-, Martens señaló que si no se llega a un acuerdo en la próxima cumbre de la CEE, que se celebrará los próximos días 19 y 20 de marzo, "se crearía un problema a su ampliación". En cualquier caso, el primer ministro belga dijo que, aunque el éxito de esta cumbre "no está garantizado", sí cabe "esperar resultados positivos".

Respecto al problema del terrorismo, González dijo también que tiene esperanzas de que se abra camino un plan de cooperación anliterrorista europeo. Sobre la supuesta existencia de torturas en el País Vasco, el presidente del Gobierno español argumentóque los militantes de ETA tienen instrucciones de denunciar siempre torturas después de ser detenidos.

Corno prueba de la inexistencia en España de este tipo de prácticas, González citó el hecho de que nunca nadie ha hecho valer sus dérechos reclamando ante el Consejo de Europa, como prevén los acuerdos que España tiene firmados con este organismo en materia de derechos humanos. La razón -afirmó- es que las denuncias sobre torturas ante los tribunales españoles tienen como fin exclusivo "desacreditar las instituciones".

El lunes, Martens y González hablaron también de Centroamérica. Ambos manifestaron ayer su unanimidad en lo que respecta a la necesidad de la celebración de elecciones en Nicaragua en la fecha prevista.

Poco antes de regresar a Madrid en compañía del ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, Felipe González recibió en la residencia ael embajador de España en Bélgica a una representación de la colonia española en este país, que está compuesta por casi 62.000 personas, casi todas emigrantes. En la conferencia de prensa, el presidente español había mostrado inquietud por sus problemas.

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