La nieve agravó el caos circulatorio.
La nevada que comenzó a caer a las ocho de la tarde de ayer llegó a cuajar en la mayor parte de la ciudad. Esto vino a agravar los problemas de tráfico causados en el centro de la ciudad por la huelga de metro -la foto está tomada en la plaza de Cibeles- e hizo especialmente peligrosa la circulación en la periferia y carreteras del norte de la capital. A medianoche en los puertos de Navacerrada y los Leones había que usar cadenas, mientras que en el de Somosierra y en algunos tramos de la carretera de Burgos hubo que echar sal para evitar los accidentes, que a esa hora eran numerosos, aunque de poca importancia. Frente a estos inconvenientes, por primera vez en lo que va de año, los niños madrileños podrán hoy jugar a lanzarse bolas de nieve.