La CEOE considera que el Gobierno y los sindicatos son los responsables del fracaso en la negociación salarial para 1984
El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) tuvo duras palabras en la asamblea general de la organización para el Gobierno y los sindicatos por haber hecho imposible la consecución de un acuerdo marco general en el que se clarificaran las relaciones industriales durante 1984. Para Carlos Ferrer, los objetivos de política económica fijados por el Gobierno exigen que los acuerdos entre los interlocutores sociales sobre incrementos salariales no se deslicen por encima del 6,5% propuesto por la Administración -"y aun en ese caso se plantearían problemas graves de financiación a las empresas"-, y la actitud de los sindicatos ha desbordado claramente ese porcentaje.
Carlos Ferrer descartó toda posibilidad de volverse a presentar a la reelección como presidente de CEOE y anunció que espera que el proceso de sustitución de la junta directiva y del propio presidente finalice antes del próximo mes de agosto.Las intervenciones de Carlos Ferrer Salat y de José María Cuevas, secretario general de CEOE, ante la asamblea general de la cúpula patronal, se centraron sobre los problemas derivados del aumento del gasto público, que provocarán este año fuertes tensiones en la financiación al sector privado.
El presidente de la cúpula patronal señaló que, después del fuerte aumento de ingresos del sector público como consecuencia del crecimiento de la presión fiscal y de la drástica política monetaria que se va a llevar a cabo, el crédito a la Administración crecerá por encima del 40% en 1984 sobre un año antes. Por el contrario, los cálculos más optimistas de incremento del crédito al sector privado -incluyendo dentro de él a las empresas del INI- será del 5%.
Suspensiones de pagos
La desproporción parece tan importante que los representantes de los empresarios no dudaron en pronosticar numerosas suspensiones de pagos en los próximos meses. Carlos Ferrer y José Luis Cerón señalaron que ya en estos momentos se detecta una contracción importante en el descuento de papel comercial por parte de las entidades financieras lo que dificultará los pagos habituales de numerosas empresas.
El presidente de la patronal y el secretario general de la misma señalaron en sus intervenciones que la ruptura de las negociaciones para tratar de conseguir un acuerdo salarial para 1984 no fueron posibles por la posición de los sindicatos, que no aceptaron en ningún momento las posiciones de la Administración en cuanto a límites salariales, y por la propia decisión del Ejecutivo que ha excluido del marco de la negociación temas que tradicionalmente se incorporaban a ella y que había permitido pactos más estables en los últimos años.
En cualquier caso, los dirigentes de CEOE trataron de quitar importancia al fracaso de tales negociaciones señalando que en el resto de las economías occidentales los acuerdos salariales suelen firmarse sectorialmente e incluso a nivel de empresa para mostrar las diferencias existentes entre los distintos sectores productivos.
En la conferencia de prensa de los dirigentes empresariales que siguió a la asamblea general, Carlos Ferrer anunció que consideraba "totalmente descartada" la posibilidad de volver a ser reelegido utilizando el mecanismo de una variación de los estatutos vigentes y se pronunció por un adelantamiento no sustancial de la fecha de celebración de las elecciones para la renovación de la junta directiva y del propio presidente de la patronal. En este sentido recalcó que, a pesar de que su mandato finaliza el próximo 9 de septiembre, consideraba mejor que el proceso de elección se cerrara antes del mes de agosto.
Hasta el momento, según los dirigentes empresariales, no hay ningún empresario que haya presentado su candidatura de manera oficial ya que existe un pacto entre todos de no hacerlo hasta que la junta directiva no abra el proceso legalmente.
Carlos Ferrer se pronunció a favor de que existiera una única candidatura, nacida de las negociaciones entre los interesados, aunque afirmó que no le parecía mal que pudieran surgir varios candidatos que "en cualquier caso gozarían de idénticos derechos". José María Cuevas se negó a pronunciarse acerca de si presentará o no su candidatura.
El presidente de la patronal afirmó no tener ningún proyecto concreto sobre su actividad futura, una vez que abandone la dirección de la CEOE, salvo dedicar más tiempo a su actividad profesional y su vida privada. No obstante, recordó que desde siempre había sentido inquietudes por los temas de carácter social y que seguiría dedicando parte de su tiempo a ellos; Ferrer afirmó que entre sus proyectos no ha entrado nunca formar parte de un partido político.
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