Aparente normalidad en el conflicto de Talbot en Poissy

La situación volvió ayer a una aparente normalidad en las instalaciones de la empresa automovilística Talbot, de Poissy, donde unos 3.500 obreros, convocados por la dirección, pudieron penetrar en la factoría con objeto de ultimar los preparativos para la reanudación del trabajo, prevista en principio para hoy.Grupos de huelguistas montaron guardia en el exterior de la fábrica y el sindicato Conferación Francesa Democrática de Trabajadores (CFDT) hizo un llamamiento a sus afiliados para que se presenten a sus puestos de trabajo con objeto de decidir nuevas formas de acción para los próximos días.

Efectivos policiales patrullaron alrededor de la factoría de Poissy para evitar enfrentamientos entre los huelguistas y los trabajadores que ayer se incorporaron a sus puestos.

El acuerdo conseguido entre el Gobierno, la empresa y los sindicatos reduce el número de despidos a 1.905, de los 2.905 previstos en principio, y el grupo Peugeot -accionista al 95% de Talbot- se compromete a invertir 1.200 millones de francos (alrededor de unos 23.000 millones de pesetas) en un plan social y de modernización de la empresa.

El conflicto de la empresa Talbot en Poissy es un exponente más de la situación de la industria automovilística francesa, sector que con un horizonte del año 1986 tiene previsto una reducción de empleo en torno a los 50.000 trabajadores.