Ambiente tenso ante la reunión del Comité Ejecutivo del PCE, convocada para hoy
La reunión que hoy celebrará el Comité Ejecutivo del Partido Comunista de España (PCE) estará presidida por la tensión acumulada tras la conclusión, el pasado fin de semana, de una docena de conferencias y congresos regionales preparatorios del congreso nacional, que tendrá lugar en Madrid entre los días 14 y 18 de este mes. Fuentes próximas al secretario general comunista, Gerardo Iglesias, afirman que la línea renovadora del partido contará con una mayoría -"en torno al 60%"- en el congreso, niegan que se vayan a admitir componendas o terceras vías y prevén una dura confrontación, que puede desembocar en una ruptura a medio plazo del PCE, pese a las declaraciones bilaterales de anhelos de unidad.
La ejecutiva comunista de hoy analizará el balance de los resultados de las conferencias regionales, que eligieron a sus nuevas directivas y a los delegados que cada región enviará al congreso nacional. Carrillistas y gerardistas parecen empatados en cuanto al número de conferencias regionales o grupos de delegaciones controladas por cada uno de ellos, pero los afectos al actual secretario general parecen contar con un número total de delegados ligeramente superior, lo que, según confían, les concederá una incómoda y exigua mayoría al imponer sus tesis innovadoras en el congreso y permitiría a Iglesias mantenerse al frente del partido, al menos hasta el próximo congreso.Sin embargo, nadie es capaz, de apostar por el mantenimiento de la unidad en el seno del PCE una vez que haya concluido el congreso, máxime cuando los gerardistas aseguran, por boca del vicesecretario general, Enrique Curiel, que "no habrá marcha atrás, ni terceras vías, ni se admitirán alternativas en ningún capítulo", aunque sí podrían aceptarse "enmiendas parciales que mejoren algunas tesis". Los carrillistas guardan silencio y ni siquiera han hecho una evaluación pública de los resultados de las conferencias regionales que se han desarrollado a lo largo del pasado fin de semana, lo que parece una tácita aceptación de su ligera inferioridad numérica, pese al rodillo impuesto en las conferencias celebradas en Madrid y el País Valenciano, donde no se respetaron las proporciones de las minorías.
Distribución
Aunque aún no se haya realizado una evaluación definitiva por los actuales dirigentes comunistas, se sabe que los carrillistas cuentan con aplastante mayoría en las delegaciones que acudirán al congreso procedentes de Madrid, País Valenciano, Castilla La Mancha, Baleares, País Vasco y Cantabria, y con una mayoría relativa en las delegaciones de Canarias y Castilla-León.Los gerardistas dominan en Andalucía, Cataluña (PSUC), Extremadura, Asturias, Murcia, Aragón, en la emigración y en el comité central (60 contra 32). Ello, según evaluaciones provisionales, podría suponerles unos 430 de los 810 delegados que asistirán al congreso. Sin embargo, es preciso tener en cuenta que muchos de los considerados como integrantes de uno u otro bando mantendrán posiciones más o menos independientes, lo que dificulta el cálculo del resultado final.
Aun en el caso de una victoria del actual secretario general, la mayoría opositora -fiel, en general, a los postulados de lo que ha dado en llamarse carrillismo- será grande. La radicalización de las posiciones por ambas partes, que ha llegado ya a suponer la concepción de dos modelos diferentes de partido, y el empeoramiento de las relaciones personales hacen pensar en la dificultad de mantener la unidad del PCE durante largo tiempo después del congreso.
Aunque tanto Santiago Carrillo como Adolfo Piñedo, considerado ahora como su más probable delfín, han asegurado que permanecerán en el PCE suceda lo que suceda en el congreso nacional, lo cierto es que el sector definido como carrillista parece hallarse poblado de militantes del ala dura, que no se consideran, al fin y al cabo, tan alejados de las posiciones del disidente prosoviético Ignacio Gallego. Éste mantiene su silencio, mientras prepara la celebración, probablemente en enero, del congreso constituyente de un nuevo partido "de unificación comunista", no alejado de la disciplina de Moscú.
Últimos encuentros
En este marco, se producen esta semana dos reuniones que podrían resultar claves para el desarrollo posterior del congreso comunista: el Comité Ejecutivo mantiene hoy un encuentro, que será seguido, el jueves, por otro del Comité Central.Será, probablemente, la última vez que ambos organismos del partido se reúnan en su actual configuración. Tras el congreso, la composición de los dos organismos directivos habrá variado sustancialmente en uno u otro sentido. Por el momento, los contactos entre ambas partes permanecen prácticamente cortados, las reuniones preparatorias se celebran por separado y solamente hoy, en la ejecutiva, se verán las caras Iglesias y Carrillo, si es que éste decide asistir a la reunión, cosa que ayer se ignoraba.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.